Qué hay detrás del éxito del activismo juvenil
Más prominentes y políticamente activos que en otros tiempos, los chicos tienen una inusual identificación con Greta y otros adolescentes
"El gobierno no escuchaba a los adultos, ni los adultos al gobierno, por lo que pensé que tal vez escucharían a una niña como yo". En 2016, con solo 9 años, Amariyanna "Mari" Copeny decidió escribirle una carta al entonces presidente Barack Obama, en la que le contaba lo que estaba haciendo para llamar la atención sobre la crisis de salud pública que sufría su comunidad, Flint, en Michigan, por la contaminación del agua con plomo.
Tras leerla, Obama voló a Flint, se fundió en un abrazo con la pequeña y le dio luz nacional a la crisis. Copeny tuvo su gran momento presidencial, y su figura como activista por el acceso al agua potable no paró de crecer. Con el hashtag #WednesdaysForWaterenvía una alerta semanal sobre los lugares que necesitan agua limpia.
Como ella, decenas de activistas jóvenes cobran cada vez más relevancia en el mundo, con la adolescente sueca Greta Thunberg como la cara más visible y convocante de una generación. De Nueva York a Berlín, de Buenos Aires a Seúl, millones de chicos la elevaron casi a la categoría de heroína por su lucha contra el cambio climático.
Menos conocidos en la Argentina, en Estados Unidos David Hogg, Jaclyn Corin, Emma González, Cameron Kasky y Alex Wind también están en el centro de la escena por su movimiento juvenil que pregona el control de armas -un tema que divide como pocos a la sociedad norteamericana-, después de sobrevivir a una masacre en la que murieron 17 de sus compañeros en la escuela Marjory Stoneman Douglas en Parkland, Florida, en febrero del año pasado. Los cinco adolescentes provocaron el movimiento #NeverAgain, que moviliza a miles de estudiantes en todo el país detrás de causas como una regulación más estricta de armas y un aumento general de la participación juvenil en la política.
Pero ¿qué hay detrás del éxito de su poder de convocatoria? ¿Por qué se fortalece en este momento la era del activismo juvenil?
En parte, es porque los jóvenes son más prominentes y políticamente activos hoy que en cualquier otro momento de la historia reciente, apunta Lawrence Prelli, profesor de la Universidad de New Hampshire que estudia el discurso político. El hecho de que las campañas contra el cambio climático -a nivel global- y la violencia armada -en Estados Unidos- tengan al frente a adolescentes, sean tan potentes e involucren a los jóvenes como miembros de base es, al menos, inusual, añade.
Eso está fogoneado, según los expertos, por una fuerte identificación con causas palpables y por los avances de la tecnología y las redes sociales. Los jóvenes pueden publicar mensajes inmediatos y sin filtro que les permiten ganar seguidores e influir con una magnitud impensable en la era previa al smartphone.
El camino hacia la fama de Thunberg empezó cuando publicó una foto de sí misma en Instagram sentada frente al Parlamento sueco para protestar por la inacción del gobierno sobre el cambio climático, hace poco más de un año.
¿Cuál pudo ser el punto de inflexión? Rose McDermott, profesora de la Universidad Brown en Psicología Política, se animó a marcar uno. Trazó el fenómeno hasta la paquistaní Malala Yousafzai y su aceptación en 2014 del Premio Nobel de la Paz. Yousafzai, que tenía 17 años en ese momento, fue reconocida por sus esfuerzos para garantizar que las mujeres y los chicos de su región natal tuvieran derecho a educación. Nacida en 1997, ganó notoriedad al escribir un blog para la BBC con el seudónimo de Gul Makai, en el que denunciaba las atrocidades del régimen talibán, como la destrucción de escuelas y la prohibición de la educación de las niñas. La propia Malala sufrió en 2012 un intento de asesinato: tenía 15 años cuando un talibán le disparó en la cabeza en el ómnibus que la llevaba a la escuela en el Valle de Swat.
"El hecho de que obtuviera el Nobel a esa edad cambió la seriedad política respecto DE que las personas más jóvenes pudieran ser fuerzas poderosas para el cambio y voceras para los problemas más urgentes", explicó McDermott.
Con 17 años, Malala fue la persona más joven en ganar el Nobel de la Paz. Ahora, el nombre de Thunberg (de 16 años) es uno de los que suenan con mayor fuerza para lograrlo el próximo viernes, cuando se anuncie en Oslo. ¿Podrá ser ese un nuevo punto de inflexión para el activismo juvenil?
Más leídas de El Mundo
Dividida. La reacción de la dirigencia colombiana tras la decisión de Petro: "No es contra el pueblo argentino"
Repercusiones. Qué dijeron los medios locales sobre la expulsión de diplomáticos argentinos
Baltimore. Encontraron dos cuerpos y confirmaron que el barco había pasado pruebas de mantenimiento antes del choque