Nuevos bombardeos sobre Irak. Rusia puso en alerta a fuerzas de combate
"Acto de barbarie": Boris Yeltsin, el Parlamento y la dirigencia política reaccionaron con ira ante los ataques norteamericanos.
MOSCU.- Rusia puso a parte de sus fuerzas navales y aéreas en estado de alerta y llamó a Moscú a su embajador en Washington, mientras los líderes políticos y legislativos daban una muestra de unidad antinorteamericana nunca vista desde la Guerra Fría y la Cámara baja del Parlamento calificaba de "acto de barbarie" el ataque norteamericano a Irak.
Por su parte, el presidente Boris Yeltsin reaccionó con extrema dureza ante los ataques de los Estados Unidos y afirmó que los mismos "violaron crudamente" la carta de las Naciones Unidas.
Mientras la ola de ira estallaba y se extendía en el Parlamento y en la dirigencia rusa, el primer ministro Yevgueni Primakov afirmaba que el ataque ordenado por Washington "es inaudito, porque fue lanzado cuando todavía el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas estaba analizando el tema".
Primakov se comunicó con el vicepresidente norteamericano Al Gore para instarle a que suspenda la ofensiva y para expresarle la irritación rusa. A primera hora de ayer, Yeltsin se reunió precipitadamente en el Kremlin con Primakov y con sus asesores militares para analizar los ataques de los Estados Unidos, que significan un importante tropiezo en los intentos de Moscú por resolver diplomáticamente la crisis.
El mandatario también llamó a la capital a sus ministros de Relaciones Exteriores y de Defensa que se encontraban fuera del país. En forma simultánea, los mandos de la armada y de la fuerza aérea recibieron la orden de poner en estado de alerta a una parte de sus dispositivos. Fuentes militares admitieron el alerta, pero calificaron de "secretos" los alcances del mismo. Sobre este tema, que despertó inquietud en el escenario político europeo, el Kremlin y el Ministerio de Defensa ruso mantuvieron un hermético silencio y no indicaron las razones de esa decisión.
La Duma (Cámara baja), aprobó de forma unánime una resolución en la que acusa a Estados Unidos y a Gran Bretaña de realizar "actividades que constituyen un acto de terrorismo internacional". En la Duma, el canciller Igor Ivanov aseguró que "Rusia se ha convertido en el claro líder de todas las fuerzas sensibles en el mundo que están en favor del gobierno de la ley".
Mientras tanto, en Bruselas, la OTAN señaló que espera que las relaciones de cooperación con Rusia no se deterioren a causa de la crisis con Irak y reiteró que está "disponible" para mantener la reunión prevista para hoy.
Pero en Moscú el ministro de Defensa ruso, Igor Sergueiev, anunció que no asistirá al encuentro con sus colegas de la Alianza Atlántica, donde iban a tratarse aspectos de la futura ratificación del tratado de reducción de armas estratégicas.
lanacionar