Semana crítica para Rajoy: enfrentará el viernes una moción de censura

MADRID.- El jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, enfrentará el jueves y el viernes un voto de confianza en momentos en que las condenas por corrupción dictadas a docenas de personas vinculadas con su partido de centroderecha amenazan con poner fin a sus seis años al frente de España.

El Congreso español acordó ayer que el debate y el voto de confianza tendrán lugar el jueves y el viernes, aunque los socialistas que propusieron la moción podrían tener dificultades para tener el suficiente apoyo para derrocar al líder del Partido Popular (PP).

Los partidos de oposición están aprovechando la debilidad de Rajoy después de que 29 personas integrantes o vinculadas con el PP fueron condenadas el jueves pasado por delitos que incluyen el tráfico de influencias y la falsificación de cuentas, en la culminación de un largo juicio por corrupción conocido como la trama Gurtel.

El líder socialista Pedro Sánchez presentó el viernes la moción de censura, un día después de que el PP de Rajoy fue condenado también a pagar 245.492 euros por lucrar en la mayor trama de corrupción de la democracia española, y quien fue el tesorero, Luis Bárcenas, fue condenado a 33 años de cárcel por las coimas que obtuvo.

El PP cerró filas detrás de Rajoy, quien dijo el viernes que está decidido a cumplir su mandato de cuatro años y que las condenas de corrupción no afectaron a ningún miembro de su gobierno. El político de 63 años superó en junio del año pasado una moción de censura.

Ciudadanos, el partido liberal que lidera las encuestas y que ganaría una elección anticipada, instó ayer a Rajoy a convocar a nuevos comicios.

El gobierno de Rajoy es débil y está manchado por la corrupción, dijo el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, en una entrevista con el diario El Mundo.

"La única salida democrática y digna es dar voz a los españoles para que elijan un nuevo gobierno y Congreso", añadió.

La primera moción de censura de la democracia la presentó el expresidente socialista Felipe González en 1980 contra el entonces premier, el centrista Adolfo Suárez. Siete años después el entonces presidente de Alianza Popular (Partido Popular), Antonio Hernández Mancha, hizo lo propio contra González.

La tercera fue contra Rajoy y la presentó el año pasado Podemos, que decidió seguir adelante con ella pese a no contar con el apoyo, como mínimo, del PSOE de Sánchez.

La democracia española "no se puede ver encadenada a la corrupción de un gobierno bunkerizado que se niega a reconocer la verdad, que su tiempo político acabó y que la Legislatura ya nació herida, porque el gobierno ya estaba herido por la corrupción", dijo ayer Sánchez.

Como ya hizo Rajoy el viernes, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, acusó a Sánchez de tratar con su moción de "cargarse la estabilidad de todos los españoles".

Rajoy canceló su agenda para estos días y el sábado no fue, como estaba previsto, a Kiev para asistir a la final de la Champions League, disputada por el Real Madrid.

Cárcel

En este contexto, el extesorero del Partido Popular (PP) Luis Bárcenas ingresó ayer en prisión después de haber sido condenado a 33 años en el mayor caso de corrupción de la democracia española.

La Audiencia Nacional ordenó la prisión inmediata para Bárcenas y otros dos cargos del PP que también fueron condenados el jueves pasado.

El que fue tesorero del partido de Rajoy ingresó en la prisión de Soto del Real (Madrid), la misma donde ya estuvo en prisión preventiva 19 meses, entre 2013 y 2015.

El tribunal ordenó su prisión incondicional "teniendo en cuenta el entramado financiero y societario organizado para la sustracción de fondos" y porque, además, "no se ha conseguido la localización" de parte del dinero que se le atribuye haber sustraído.

Bárcenas, de 60 años, atesoró entre los pedidos de coimas una suma de 1,24 millones y el dinero que se cree que sustrajo de una caja paralela del PP representa total de 48,2 millones de euros, en cuentas en Suiza.

Entre los 29 condenados el jueves por este caso se encuentra la esposa de Bárcenas, Rosalía Iglesias, condenada a 15 años de cárcel por colaborar con el extesorero en el ocultamiento de sus fondos en Suiza.

Según la sentencia, por la que el PP fue condenado a pagar 245.492 euros por beneficiarse de la trama de corrupción, el testimonio de Rajoy no fue lo "suficientemente verosímil" para rebatir las pruebas de la contabilidad opaca del partido.