Son más de 1000 los muertos por el terremoto en Argelia

ARGEL.- Más de 1000 personas murieron en Argelia como consecuencia del terremoto que ayer arrasó el norte del país y otras 6700 resultaron heridas, según datos oficiales provisorios, mientras el gobierno argelino calificó al drama como "catástrofe nacional".

Un comunicado del Ministerio del Interior precisó que los muertos suman 1092 (624 en Bourmedes, 50 kilómetros al este de Argel, 457 en la capital argelina y el resto en localidades aledañas) y los heridos 6782.

Las autoridades admitieron que las cifras pueden aumentar, dado que se teme que cientos de personas hayan quedado bajo los escombros de las casas derrumbadas.

"Lo peor pasó", señaló el ministro de Interior, Yazid Zerhouni, y aseguró que el gobierno "cuenta con los medios para proveer alojamiento a la casi totalidad de los afectados".

Hasta el momento, cientos de personas permanecen desaparecidas en base a testimonios de sus familiares, aunque el ministerio dijo que esas aportaciones deben ser tomadas con "cautela".

Los hospitales de distintas ciudades están desbordados y los cadáveres -muchos pertenecen a niños- son colocados al frente de sus edificios, mientras los heridos son atendidos por los médicos al aire libre.

"Es un momento trágico. Es un dolor que golpea al conjunto de Argelia", dijo hoy el primer ministro, Ahmed Ouyahia, en declaraciones a la radio estatal, y definió lo ocurrido como una "catástrofe nacional".

El terremoto de ayer -de 6,8 grados en la escala de Richter- es el más devastador y sangriento en Argelia desde el registrado en 1980, que alcanzó los 7,5 grados y mató al menos a 3000 personas.

El movimiento telúrico se registró a las 19.44 hora local (15.44 hora argentina), durante cinco minutos, en momentos en que muchas familias argelinas se preparaban a compartir la cena.

En Argel numerosos viviendas se derrumbaron, en particular, en los barrios populares de Bab el-Oued, el mercado (casbah) y Belcourt.

Los destrozos son todavía más serios en el este de la capital, donde decenas de edificios quedaron destruidos en Bourmedes, capital del departamento homónimo, que hoy recibió la visita del presidente de la república, Abdelaziz Bouteflika.

Escenas de completa destrucción se vieron en Corso, un poblado cercano a Bourmedes, donde la mezquita, la cárcel y las casas quedaron reducidas a escombros.

"Tenemos miedo de volver a casa. Tememos que se nos caiga todo encima y por el momento preferimos quedarnos en la calle. Al menos hasta que duren los movimientos telúricos", dijo un habitante de Corso, otro poblado vecino.

Las sacudidas de la tierra continuaron hoy hasta el mediodía, con algo más de 300 replicas leves, que bastaron para aumentar el temor entre los pobladores.

La Federación internacional de las sociedades de la Cruz roja y la Medialuna Roja exhortó hoy a recaudar 1,5 millones de dólares para destinarlos a las víctimas de Argelia, informó hoy el organismo en Ginebra.

El dinero se distribuirá en las operaciones de socorro que cumple la Medialuna Roja argelina para brindar alojamiento, víveres, asistencia sanitaria y psicológica a al menos 10.000 personas.

El país se encuentra además aislado telefónicamente casi por completo con el exterior, dado que el sismo dañó los cables submarinos del servicio, ubicados a 2500 metros de profundidad, informaron fuentes de Telecom Francia.

Grupos de socorristas, protección civil, bomberos y el ejército trabajan en Argel y las principales ciudades afectadas por el sismo para asistir a los damnificados.

En tanto continúan las acciones para tratar de rescatar a posibles sobrevivientes de entre los escombros de viviendas y edificios. A veces los socorristas se orientan por los gritos o gemidos de personas atrapadas.

Las autoridades argelinas decretaron tres días de luto por las víctimas del sismo y en todo el país se suspendieron los espectáculos y las manifestaciones deportivas.

La mayoría de los 32 millones habitantes de Argelia vive en el norte del país y, al menos, 2,6 millones se concentran en Argel, la capital.

Fuente: Ansa