Un sismo golpea a China y deja 160 muertos

PEKÍN (Reuters).- El peor terremoto en China en tres años dejó ayer, por lo menos, 160 personas muertas y a más de 5700 heridas, según informó el Ministerio de Asuntos Civiles.

El sismo de magnitud 6,6 remeció una remota región montañosa de la provincia de Sichuán, en el sudoeste de China, cerca de donde un terremoto dejó casi 90.000 muertos en 2008.

El temblor ocurrió en el condado de Lushan, cerca de la ciudad de Ya'an, a una profundidad de 12 kilómetros, dijo el Servicio Geológico de Estados Unidos. Se sintió en la capital provincial, Chengdu, y en provincias vecinas, lo que llevó a decenas de miles de personas a escapar de sus hogares, según publicaciones en redes sociales.

La mayor parte de las muertes se produjeron en Lushan. Imágenes de sitios de noticias chinos mostraban edificios derrumbados y gente cubierta con vendajes ensangrentados recibiendo tratamiento en tiendas de campaña fuera del hospital. La electricidad y el agua potable estaban cortadas en el área debido al sismo.

El primer ministro chino, Li Keqiang, viajó a la zona de desastre en helicóptero para expresar su respaldo a las operaciones de rescate. "Las primeras 72 horas son el período dorado para rescates -dijo Li-. No podemos demorarnos un minuto."

Chen Yong, vicedirector de la oficina de respuesta a terremotos del gobierno de la ciudad de Ya'an, advirtió: "Nosotros creemos que la cantidad de muertos podría aumentar algo, pero no subirá mucho".

La agencia oficial Xinhua añadió que 6000 soldados estaban en la región para ayudar en los esfuerzos de rescate. En Lushan, un grupo de socorristas logró rescatar a 91 sobrevivientes de entre los escombros.

En las aldeas más cercanas al epicentro, casi todas las edificaciones de baja altura habían colapsado.

La Federación Internacional de las Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja dijo que estaba consultando a la Sociedad de la Cruz Roja de China sobre si era necesaria la ayuda internacional.

En tanto, la Asociación Meteorológica de China advirtió de la posibilidad de que ocurran deslaves en Lushan. La zona registró ya 789 réplicas del terremoto, dijo la administración de respuesta a sismos de China.

En 2008, la respuesta oficial al sismo de Sichuán fue lenta y el régimen incluso trató de ocultar el verdadero número de muertos. Esa estrategia le valió críticas generalizadas.