Video: así reprimen las fuerzas de seguridad en Venezuela
La ONG Humans Rights Watch compiló imágenes que exhiben la brutalidad con la que agreden a los manifestantes; al menos cien personas murieron en más de cuatro meses
Manifestantes arrollados por tanques. Violentas golpizas. Disparos a quemarropa. Ataques a centros de salud y equipos médicos. Estos son algunos de los ejemplos de represión por parte de fuerzas de seguridad y “colectivos” (grupos paramilitares) contra los manifestantes que participan en las protestas en Venezuela , que ya cumplieron más de cuatro meses y dejaron por lo menos cien menos.
La ONG Human Rights Watch (HRW) compiló escenas que reflejan la brutal represión por parte del régimen de Nicolás Maduro en un fuerte video de poco más de dos minutos, en el que, hacia el final, llaman a los “líderes de la región” a “redoblar la presión sobre Maduro para terminar con la violenta represión y exigir que los responsables sean llevados ante la justicia”.
“Desde principios de abril de 2017, decenas de miles de venezolanos han salido a las calles protestando el creciente autoritarismo del gobierno, que ha respondido con una feroz represión. Miembros de las fuerzas de seguridad han disparado municiones antidisturbios a quemarropa contra manifestantes, arrollado con vehículo blindado a manifestantes, golpeado brutalmente a personas que no mostraron resistencia e irrumpido en las viviendas de presuntos opositores. Las fuerzas de seguridad también han detenido arbitrariamente a cientos de manifestantes, transeúntes y críticos, y los han llevado ante tribunales militares para juzgarlos”, dice la ONG en su sitio web.
En el video se ven ataques por parte de distintas fuerzas de seguridad de Venezuela, como la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana (policía militarizada) así como los “colectivos” que responden al chavismo en las sombras. Algunos de esos casos han sido emblemáticos, como el asesinato a tiros del joven de 22 años David Vallenilla.
El informe apunta que si bien se emplearon “una variedad de municiones antidisturbios, como perdigones, canicas, cartuchos de gases lacrimógenos y otros cartuchos denominados no letales”, en varios casos “estas municiones se han usado de forma inadecuada, a una distancia demasiado corta o apuntando directamente contra las personas, causando muertes o graves lesiones”.
Entre otras prácticas, HRW denuncia que “miembros de las fuerzas de seguridad también han disparado hacia manifestaciones desde techos y han arrollado a manifestantes con una tanqueta blindada” incluso cuando “las víctimas claramente no representaban una amenaza inminente y no ofrecieron resistencia; algunas ni siquiera estaban participando en las manifestaciones”. “Las fuerzas de seguridad han disparado cartuchos de gases lacrimógenos directamente contra manifestantes, hacia equipos médicos y el edificio de la Cruz Roja en Caracas, así como en dirección a centros comerciales, viviendas, universidades y establecimientos de salud”, agrega.
El informe de la ONG subraya que en el marco de las protestas hubo detenciones y juicios arbitrarios (más de 4000, según el Foro Penal Venezolano), además robos, abusos y tortura por parte de las fuerzas. Entre otras formas de violencia, también mencionan la irrupción en viviendas y la irrupción en la Asamblea Nacional del pasado 5 de julio.
“Cuando uno ve imágenes de la represión, pierde total credibilidad la versión del gobierno de que se enfrenta a una oposición violenta y golpista”, sostuvo José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch.
“Durante años, Maduro ha actuado asumiendo que puede cometer abusos sin ningún tipo de control, debido a la total concentración de poder y falta de independencia judicial en el país -indicó Vivanco-. Salvo que los líderes latinoamericanos redoblen la presión y le muestren que esto ya no será tolerado, habrá cada vez más imágenes estremecedoras de represión”.
Desde que comenzaron las manifestaciones pacíficas, en abril último, murieron cien personas, según los datos oficiales.
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