Tendencia: el fenómeno de los espectáculos musicales pensados para extranjeros. A la medida de los turistas
La gran afluencia de forasteros hizo que aflorasen shows tangueros y folklóricos de gran producción y con cenas incluidas a precios prohibitivos
Allí donde desfilan vacas y caballos en el predio ferial de la Rural de Palermo, las gradas se visten de platea. Cada visitante recibe un poncho térmico (que después deberá devolver), y un juego de luces, propio de un musical de Broadway, anuncia que algo distinto está por transcurrir en esa arena. Enseguida, suena la música de Lito Vitale y aparecen en escena 24 caballos y 57 personas, entre bailarines, cantantes y jinetes. Todo lo que viene después es espectacular: carruajes, coreografías multitudinarias, batallas de a caballo y un despliegue que ofrecían las antiguas stravaganza-spectacle de antaño, en la que subían a escena no sólo artistas sino también animales de todo tipo, con vestuarios suntuosos y hasta fuentes.
El espectáculo descripto es "Opera Pampa", estrenado recientemente y pensado, primordialmente, para ofrecerles un gran musical sobre historia argentina a los turistas extranjeros. Es una variante de los grandes espectáculos tangueros que vienen ofreciéndose desde hace tiempo en recintos no menos espectaculares y lujosos como Señor Tango, La Esquina Carlos Gardel o, desde hace sólo ocho meses, el Piazzolla Tango. A éstos se suman otros de menor producción y números musicales callejeros en la Feria de Mataderos. "Opera Pampa" está escrita y dirigida por Héctor Berra ("Los Muvis") y la música incidental es de Lito Vitale, en tanto la de las canciones es de Lucho González. El elenco lo encabeza Rodrigo Aragón, acompañado por el ballet Brandsen, con las coreografías de Mabel Pimentel y Oscar Murillo. Los jinetes fueron especialmente seleccionados en San Antonio de Areco, San Pedro y Capilla del Señor. "Es una coproducción de Entretenimientos Universal y la Rural. El espectáculo se gesta en función de que la Rural tiene un plan de negocios en el que hay pabellones destinados a exposiciones. A partir de eso, propusimos utilizar los edificios históricos y el campo para realizar espectáculos que permitan interactuar con el público de las exposiciones", explica Mario Guersi, productor ejecutivo del espectáculo. Luego, la idea se amplió hacia el mercado turístico y actualmente, ya hay dos funciones de "Opera Pampa", los viernes y sábados, a las 19.30. La entrada es prohibitiva para el público argentino: 120 pesos para ver sólo el show, 170 con cena criolla incluida y 200 con cena "vip" (el vino y la vajilla hacen la diferencia), pero se llena de extranjeros que salen asombrados por el despliegue. "Para que no se asuste el público local, se está trabajando con acuerdos específicos para que pueda venir. También tenemos el plan de acercarlo a los colegios, pero son segundas etapas. Supongo que para fines de año", explica el productor. El público que asiste para ver batallas entre unitarios y federales, escenas de "La cautiva" y cuadros folklóricos espectaculares es variopinto y aceptan esta selección de la historia argentina, contada como una gran película.
Moulin Rouge porteños
En 1989, el cantor de tangos Fernando Soler abría un pequeño local para 140 cubiertos en el que trabajaba en cooperativa con mozos y bailarines. Los operadores de turismo llevaban a los visitantes con la idea de ir a comer "a la casa de un amigo cantor". La fórmula funcionó mucho mejor de lo que esperaba y, en 1994, alquiló otro más grande en La Boca. También le quedó chico. Así fue que pudo cerrar trato con los más de 30 herederos de Brenta y Roncoroni y compró los viejos galpones de esa tienda de ramos generales del barrio de Barracas. Hoy es un lujoso local para 1500 personas, ambientado como los más importantes music hall europeos. Allí trabajan más de 100 personas en pos de esta cena show al nivel de Broadway. Cinco parejas de bailarines, coreografías aéreas, acróbatas, las mellizas Pereyra, la orquesta de Ernesto Franco, el charanguista Rodolfo Ruiz, el mismo Soler y dos jinetes a caballo forman parte de este espectáculo que une tango con algo de folklore y un concepto de show inusual. Por supuesto, todo consumible junto a una cena fastuosa. "Trabajamos, principalmente, con los agentes y los hoteles, pero también hay mucha gente que viene directamente a sacar entradas a la puerta. También los fines de semana vienen algunos argentinos y los días hábiles muchos empresarios que traen de visita a extranjeros -explica Soler-. Sigo usando mi espacio como una coyuntura en el que se generaron muchos movimientos". Por su escenario pasaron Raúl Lavié, Guillermo Fernández, Cecilia Milone, Pichuquito y Walter Ríos. En tanto, en sus mesas se sentaron desde Gorbachov y Clinton hasta Liza Minnelli y los Backstreet Boys. La cena-show cuesta 160 pesos, pero asciende a 300 en el sector "vip", casi un lujo.
El viejo teatro Florida, que durante varias décadas fue el burlesque más conocido de Buenos Aires, fue reciclado en octubre de 2003 para convertirse en el Piazzolla Tango, un sitio exquisito con muchas semejanzas con el Moulin Rouge, de París. Tuvo la dirección coreográfica de Milena Plebs (ahora la de Roberto Reynoso), y actúan en el show (exclusivo de tangos y con un marcado eje puesto en la música de Astor Piazzolla) Guillermo Fernández, Roxana Fontán, la orquesta de Cristian Zárate y cuatro parejas de baile. "El espectáculo tiene el nivel que podría tener en cualquier teatro importante y la idea es modificarlo cada 6 meses. Es un producto netamente para el turismo y nos manejamos con operadores. De todos modos, estamos implementado planes para facilitar el acceso del público local", explica Marcelo Feito, gerente del lugar. La entrada para ver sólo el show cuesta 110 pesos, pero asciende a 150 con cena y 300 en el "vip". Entretanto, en la Esquina Carlos Gardel las tarifas varían entre 120 y 360.
El 14 de julio, en el teatro Broadway se estrenará "Soledad... una historia de tango", un musical de la compañía internacional de tango-danza "Tangueros unidos" dirigida por Rodolfo Aguerrodi y la bailarina japonesa Miho Omaki. "Es un espectáculo con un argumento y está dirigido tanto a extranjeros como a los argentinos. No hay que desatender que el tango es una expresión artística, pero también es un negocio que mueve más de mil millones de dólares anuales que no circulan por Buenos Aires. Era hora de que eso empiece a circular por aquí", explica el director Rodolfo Aguerrodi, que volvió de una extensa gira por Japón y Europa para invertir todos sus ahorros (40 mil dólares) en el espectáculo. En otra línea, en el museo Saavedra se representan las obras históricas "Manuel Belgrano, ensayo ¡general!" y "La pequeña aldea", de López Girondo y Uccello.
Alternativas for export
- "Opera Pampa". Av. Sarmiento 2704.
- Señor Tango. Vieytes 1655.
- Piazzolla Tango. Florida 165
- Esquina Carlos Gardel. C. Gardel 3200.
- Obras del Museo Viajero. Museo Saavedra, Crisólogo Larralde 3609.
- Feria de Mataderos. Lisandro de la Torre y De los Corrales.
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