Un mito recorre las redacciones: Chiche Gelblung viajó a cubrir la noticia del desastre ecológico al Atolón de Mururoa. Cuando llegó, los peces muertos no estaban en la costa porque se los había llevado la marea. Fue a una pescadería, compró unos cuantos y los tiró para la foto. Gelblung confirma el mito sin ningún tapujo: "Decir la verdad es complicado, pero yo no tengo ningún problema, no podía volver de la Polinesia sin la nota. La situación había existido, pero no habíamos llegado a tiempo. Las mejores fotos de la historia fueron producidas. Hacerle photoshop a Cecilia Roth y dejarla de 19 años es fake news. Susana Giménez sí te lo pide pero Roth no, tiene el encanto de la madurez".
La televisión de los ‘90 quedó signada por sus creaciones: la autopsia al extraterrestre, los cirujanos filipinos, la máquina de la verdad: "Me divierte nadar en aguas turbulentas, me siento cómodo, me sale natural. No creo que haya una sola manera de encarar las cosas". Nueve premios Martín Fierro cosechados entre radio y tv coronan la biblioteca de la casa en la que recibió a Pablo Sirvén para Hablemos de otra cosa , los que faltan se los regaló a sus nietos para que jueguen.
Samuel Gelblung intenta escapar a la polarización en la política y en los medios : "El periodismo hoy está dominado por la grieta y a mi me molesta transitarla. Yo no soy peronista, nunca me sentí peronista, aunque alguna vez he votado al peronismo. Soy comunista y tengo formación marxista. Voté a Alberto porque estaba desilusionado con Macri, en algún momento le creí", afirma Chiche.
Hace pocos días fue noticia por su internación y poco después por la pelea al aire con Rodrigo Lussich en "Polémica en el bar". Las declaraciones posteriores del panelista alimentan su figura de severo con tintes maltratadores: "Lussich fue un invento mío como cronista de Radio 10, se ve que tiene como un trauma. Yo me enojo pero enseguida se me pasa, me olvido. El rencor no es una cuerda que vibre en mi".
Hablemos de otra cosa se estrena los viernes a las 22 por LN+