Cinco increíbles transformaciones de los candidatos al Oscar

Nada dice "Oscar" como interpretaciones que expanden los límites de las transformaciones físicas. Este año, muchos de los nominados a los premios de la Academia mostraron hasta qué punto estaban comprometidos con sus personajes. Veamos a sólo cinco de ellos:

*1. JARED LETO EN DALLAS BUYERS CLUB

Jared Leto se tomó su tiempo para elegir un personaje que lo motivara a regresar a la pantalla grande. Luego de seis años de dedicarse exclusivamente a su faceta como cantante, leyó el guión de Craig Borten y Melisa Wallack y decidió que tenía que interpretar a Rayon, la contracara de Ron Woodroof (Matthew McCounaghey). Las razones por las cuales se enamoró del personaje resaltan cuando uno ve Dallas Buyers Club. Rayon no solo representa el costado más luminoso de la película (a pesar del evidente elemento trágico que lo circunda) sino también lo intermitente. Muchas veces la vemos en off, y tantas otras emitiendo breves comentarios, y es eso justamente lo que la hace inolvidable: atraviesa el relato sin necesidad de sobreexposición. El desafío de interpretar a un transexual con VIH fue aceptado por Leto con total compromiso y el actor documentó todo el proceso de cambio (desde la pérdida de peso hasta el notable trabajo vocal) mediante imágenes en su cuenta de Instagram. "Muchas veces uno hace películas independientes y se entrega al personaje y no funcionan. Eso puede desmotivarte y romperte el corazón, afortunadamente este no fue el caso", expresó Leto, el gran favorito para llevarse el Oscar el 2 de marzo.

*Jared Leto como Rayon:

*2. JENNIFER LAWRENCE EN ESCÁNDALO AMERICANO

Cuando se dio a conocer que David O. Russell había elegido a Jennifer Lawrence para el rol de Rosalyn Rosenfeld en Escándalo americano (película ligeramente inspirada en eventos reales ya que, como reza en su prólogo, "algo de esto pasó"), los comentarios en contra presentaban el mismo argumento que cuando obtuvo el rol de Tiffany Maxwell en El lado luminoso de la vida: "¿No es demasiado joven para el papel?". En ambas oportunidades Lawrence hizo lo que mejor le sale: abordar al personaje desde un costado emocional y carismático como solo contadas actrices pueden hacerlo. Más allá de la transformación estética que le implicó Escándalo americano (desde las pelucas hasta la vestimenta), su veta camaleónica se vislumbra más en cómo, en el lapso de un año, supo fluctuar entre la tenacidad y sobriedad de Katniss en En llamas y el histrionismo y comic relief de Rosalyn. Si bien el rol más conmovedor de Escándalo americano es el de Amy Adams, Lawrence vuelve a dominar cada una de las escenas en la que aparece con un magnetismo que la acompaña en lo que es, hasta el momento, una carrera inobjetable.

*Jennifer Lawrence como Rosalyn Rosenfeld:

*3. MATTHEW MCCOUNAGHEY EN DALLAS BUYERS CLUB

La mutación fundamental por la que atravesó Matthew McCounaghey se relaciona con las decisiones inteligentes que comenzó a tomar para enriquecer su carrera. La transición de roles estereotipados en comedias románticas a papeles multidimensionales en cine independiente (Bernie, Killer Joe, Mud) fue lo mejor que le pudo haber pasado a McCounaghey, ya que nos hizo conocer todo su potencial en producciones personales y viscerales. Lo mismo sucede con su personaje de Ron Woodroof en Dallas Buyers Club, para el cual, al igual que Leto, tuvo que comprometerse perdiendo más de veinticinco kilos durante meses para una película que se rodó en menos de treinta días, sin ningún tipo de ensayo previo y luego de haber estado encajonada por una década. Por otro lado, el actor se encontró en reiteradas ocasiones con la familia de Woodroof, que le cedió sus diarios íntimos para que McCounaghey pueda comprender aún mejor toda la empresa que él llevó a cabo con el Dallas Buyers Club. La intensa preparación rindió sus frutos ya que el actor obtuvo el Globo de Oro y el SAG por su interpretación y es uno de los grandes candidatos (junto a Leonardo DiCaprio y Chiwetel Ejiofor) a ganar el Oscar.

*Matthew McCounaghey como Ron Woodroof:

*4. JONAH HILL EN EL LOBO DE WALL STREET

Recientemente Jonah Hill contó en una entrevista que aceptó cobrar un salario mínimo (y por "mínimo" estamos hablando de 60.000 dólares) para poder estar en El lobo de Wall Street. El proyecto, desde ya, era soñado para el actor: ser la mano derecha de Leonardo DiCaprio y recibir directivas de Martin Scorsese. Asimismo, el propio Scorsese aseguró que después de ver Moneyball, no necesitó que Hill atraviese por la etapa de castings. El papel de Donnie Azoff ya era suyo. Si bien a DiCaprio le toca la difícil tarea de sostener la película durante tres horas (tarea que cumple con un resultado brillante y memorable), Hill debió ser parte de algunos de los momentos más incómodos del gran film de Scorsese. Desde una secuencia hilarante pero vergonzosa que transcurre en una fiesta hasta comentarios e intervenciones donde la personalidad de Donnie se vuelve aún más detestable, Hill hace un extraordinario trabajo potenciando un papel de por sí fuera de control. Independientemente de lo anecdótico como esos dientes prostéticos (entre otros componentes prostéticos que debió utilizar) o ese peinado, lo mejor de la actuación de Jonah Hill está en ir a fondo con las dos cualidades intrínsecas de Donnie: lo payasesco y lo repulsivo.

*Jonah Hill como Donnie Azoff:

*5. AMY ADAMS EN HER (Y ESCÁNDALO AMERICANO)

2013 fue un gran año para Amy Adams. Por un lado, nos encontramos con su interpretación de Sydney Prosser en Escándalo americano, interpretación que va a contramano de la del resto del elenco. Si bien toda la película funciona como un gran chiste en sí mismo, Adams es la única que tiene en sus manos un personaje complejo y humano como lo es el de Sydney. La actriz explota su sensualidad como nunca antes, pero sin olvidar el componente vulnerable que define a esa mujer que anhela un mejor porvenir. Por otro lado, hay que destacar el gran trabajo que hace en Her, como la confidente del personaje de Joaquin Phoenix. Adams no será parte de muchas secuencias de la película de Spike Jonze, pero cuando entabla esos diálogos con Phoenix sobre el amor como acto de locura y sobre lo que implica mantener una relación viva, el film se ilumina con su presencia. La Academia nominó a Adams por su actuación en Escándalo americano (la categoría secundaria estaba carente de espacio) y si bien difícilmente le gane a Cate Blanchett, es una manera de celebrar su capacidad para adaptarse a roles tan distintos y bajo la mirada de cineastas tan disímiles.

*Amy en el papel homónimo de la película de Jonze: