Circuitos españoles en pie de guerra
España enfrenta serias dificultades para imponer su producción cinematográfica fronteras adentro. Allí, como en la Argentina, existen una política de cuota de pantalla y pautas para la continuidad de un film en cartel, cosa de paliar la feroz competencia del cine norteamericano, que a través de sus filiales ejerce presiones sobre los exhibidores, que en esta temporada están desatando fuertes polémicas.
En España hay 40 millones de habitantes y 4000 salas de cine, de las cuales 1200, al menos, le han declarado la guerra a la distribuidora Buena Vista International, perteneciente al grupo Disney. Fastidiados por lo que consideran prácticas abusivas de la majors estadounidenses, cuatro empresas españolas dedicadas a la exhibición se negaron a estrenar la comedia de terror "Scary Movie 4". No obstante, la distribuidora anunció que seguiría firme con la decisión de ocupar 400 pantallas (el 10 por ciento del total de la península), a pesar de que 150 de las rebeldes decidieron levantarla apenas una semana antes de su estreno. Los cuatro grupos de exhibición que se han negado a aceptar las condiciones económicas impuestas por Buena Vista -Cinesa, Abaco, Yelmo y Cinebox- representan el 30% del total de salas en España y su cuota de mercado es del 45%.
De acuerdo con lo expresado por los directivos de Cinebox, el alza de los porcentuales que exigen las distribuidoras norteamericanas sumada al descenso de la cantidad de espectadores, el alza del costo de mantenimiento y reciclaje de las salas y el hecho de que algunas hayan cerrado los llevaron a la decisión de decirle basta, en este caso, a una empresa de Disney, cuyos estrenos de "Cars" y "Piratas del Caribe: el cofre de la muerte" también están en peligro. Según los directivos de los circuitos, en el resto de Europa los porcentuales que se llevan las majors son menores.
Para poder proyectar una película como "Scary Movie 4" en un cine español, el exhibidor tiene que pagar a la distribuidora el 60% de la recaudación de la primera semana, el 55% de la segunda y el 50, si llega, de la tercera. Las condiciones de pago de las películas se pactan por paquetes de películas o por películas de forma individual, dependiendo del éxito de taquilla potencial que se evalúa previamente. Los cálculos realizados por estas empresas indican que el costo promedio de una película con esas características es del 54% de la recaudación. Para distraer y entusiasmar al público de todo este conflicto, Disney sorteará 50 iPods entre los concurrentes en los primeros días de exhibición de "Scary Movie 4", cuya entrega anterior superó los 1,8 millones de espectadores. Las empresas habrían asegurado que su posición es firme y que no cederán en sus reclamos.