La atracción fue Blade Runner
VENECIA.- Veinticinco años después del estreno mundial en esta ciudad de Blade Runner , su director, Ridley Scott, presentó en la cuarta jornada del Festival de Cine de este año la tercera y "definitiva" versión de lo que muchos consideran como la obra maestra de la ciencia ficción cinematográfica.
Junto a esta reposición, que para muchos constituye un verdadero estreno, el día estuvo marcado en la competencia oficial por un segundo film norteamericano dedicado a mostrar las cicatrices abiertas por la guerra de Irak ( In the Valley of Elah , de Paul Haggis) y las dos obras más recientes de Ken Loach y Eric Rohmer, además de la llegada de uno de los matrimonios más estelares de Hollywood: Brad Pitt y Angelina Jolie.
Restaurado en imagen y sonido (Dolby digital 5.1), sin narrador en off, con escenas inéditas y, sobre todo, sin el final "feliz" impuesto por la producción, Blade Runner, the Final Cut saldrá en DVD en Estados Unidos en diciembre y en el resto del mundo en enero de 2008.
"Este fue el primer film que dirigí en Hollywood y no fue fácil hacerlo", dijo Scott durante una conferencia de prensa en la que estuvo acompañado por tres de los actores del film: Rutger Hauer, Edward James Olmos y Daryl Hannah, así como Isa Dick-Hackett, la hija de Philip K. Dick, el autor de la novela que inspiró la película.
El cineasta empezó a trabajar en la restauración del film en 2000 y los cambios se aplicaron tanto en el negativo como en la banda sonora. Entre las nuevas escenas más sugerentes está la de un unicornio con el que sueña el protagonista y sirve de anticipo para la imagen del origami que se ve al final. "Sólo con una obra de alto nivel artístico y que haya alcanzado el rango de clásico se puede hacer una operación de este tipo", señaló Scott, sin falsa modestia.
Más guerra y más política
En cuanto a la sección oficial, quedó ratificado en la víspera el protagonismo de la guerra de Irak y sus consecuencias abiertas, sobre todo cuando los soldados de Estados Unidos regresan a casa. Un día después de que Redacted , de Brian de Palma, conmoviera con la reconstrucción casi documental de los abusos norteamericanos durante el conflicto, Paul Haggis (ganador del Oscar por Vidas cruzadas ) se ocupa en su segundo trabajo como director, In the Valley of Elah , un relato inspirado en hechos reales, del estado de ánimo que algunos soldados llevan en la vuelta al hogar.
En el film, que tuvo un muy buen recibimiento, un magistral Tommy Lee Jones interpreta a un veterano de Vietnam cuyo hijo es asesinado tras volver de Irak y que mientras trata de recuperarse de lo ocurrido comienza a poner en duda la fe en su país y en sus políticas. Con la ayuda de una detective (Charlize Theron), Jones sale en busca de los asesinos del soldado, que antes de morir le había revelado a su madre los horrores de la ocupación, que incluía la muerte de un niño iraquí arrollado por un camión que él mismo conducía.
Al hablar tras la proyección, Haggis dijo que procuró impedir que su opinión personal sobre la guerra influyera en la película. "Fue difícil financiarla, porque cuando comenzamos con este proyecto nuestro presidente tenía un apoyo del 80 por ciento, todo el mundo iba con banderas en el coche y nos decían que era antipatriota cuestionarse lo que estaba ocurriendo en Irak", recordó.
En tanto, una radiante Theron dijo que no visitará a las tropas de Estados Unidos en Irak siguiendo los pasos de su colega Scarlett Johansson, porque prefiere que los soldados sean repatriados. "Está bien que Scarlett lo haga, pero yo prefiero que vuelvan a su casa, que sean cuidados y queridos, y nada me daría más alegría que verlos de vuelta en Estados Unidos", dijo antes de reconocer que las tropas hacen una labor "peligrosa e importante".
La vuelta de dos maestros
La política también estuvo presente, aunque desde otra perspectiva, con el regreso del último gran representante del cine de denuncia social, el inglés Ken Loach, que en It s a Free World... denuncia la explotación de los inmigrantes ilegales en Europa. Basado en un guión original de su habitual colaborador Paul Laverty, el film cuenta la historia de una madre soltera de clase baja que hace fortuna sobre la piel de los menesterosos del mundo entero que llegan legal o ilegalmente al Reino Unido.
Yendo directamente al grano como es su costumbre, Loach describe un mundo sin reglas ni moral en el que los más fuertes dictan las leyes y las cambian a su antojo mientras los más débiles se resignan a su papel de víctimas predestinadas.
En cambio, decepcionó a algunos críticos la más reciente obra de otro viejo maestro del cine europeo, el francés Eric Rohmer. Les amours de Astrée et Celadon , traduce en imágenes un olvidado texto del siglo XVII que habla de pastores y ninfas enamoradas, y en el que el aplaudido realizador de El rayo verde retoma algunos de sus temas preferidos (el amor que debe superar todos los obstáculos, la fidelidad), traducidos en diálogos ampulosos recitados por actores casi aficionados.
"Por mi precario estado de salud no podré acompañar a Astree y a Celadon llevados por ese viento que me gusta mucho filmar y que quizás se sienta pasar por la laguna", dijo Rohmer, de 87 años, al explicar en una carta que debido a problemas de salud no pudo estar presente en la muestra que le otorgó el León de Oro hace 21 años precisamente por El rayo verde .
Mientras tanto, sigue el desfile de estrellas en el Lido. Ayer llegaron Brad Pitt, Angelina Jolie y sus hijos, con la idea de acompañar el estreno mundial de El asesinato de Jesse James , el nuevo trabajo de Pitt, y también Woody Allen, cuya película Cassandra s Dream , con Colin Farrell y Ewan McGregor, rodada con anterioridad al film que acaba de hacer en Barcelona, será presentada oficialmente hoy.
lanacionar