Con diploma de grande

Con la paciencia de la araña, los Caballeros de la Quema fueron haciendo su camino. Varios años de batallar bares y suburbios les permitieron llegar a su maduro cuarto disco y a este reconocimiento del público.

El sábado, casi cinco mil personas llegaron hasta Parque Sarmiento portando banderas y ganas de compartir las canciones de la banda. Y el grupo no las defraudó: durante casi tres horas, y comenzando con "Pejerrey", tocaron sus temas nuevos, pero también los de siempre, incluido "Primavera negra", el primerísimo de su historia.

Rock y reggae. Letras de amor borracho y crónicas de duro suburbio. Estribillos gancheros y tristes baladas tangueadas. Y una banda que, con el agregado de vientos, logró sonar bien en un lugar tan dudoso sonoramente como es el Sarmiento.

Este pase a ligas mayores de los Caballeros merecía festejo. Por eso, allí estuvieron varios músicos invitados. Afo Verde, productor del disco "La paciencia de la araña", agregó su guitarra en "Oxidado" y "Madres". En este último, dedicado a las Madres de Plaza de Mayo, subió también León Gieco, que fue recibido con una ovación y que se quedó para compartir "Hasta estallar".

También estuvo Lito Vitale en teclados, en los dos temas que abrieron la segunda parte del show y Ricardo Mollo puso su guitarra en "Nop Chamuyes" y en el cover de Sumo "La rubia tarada".

Con una escenografía que remeda la tela de una araña y evidente felicidad a flor de piel, la banda devolvió la fidelidad y el aguante de los seguidores convirtiendo la noche en una fiesta.

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