Días de radioteatro

Una de las nuevas producciones del Teatro Nacional Cervantes es "Lágrimas en el Sahara", con estreno previsto para el 14 de septiembre, de María Victoria Menis, joven vinculada con el medio cinematográfico como productora y directora, y que ahora debuta como autora teatral.

La pieza, que ganó el primer premio en el concurso de obras teatrales del Instituto Nacional del Teatro, el año último, será interpretada, entre otros, por Rubén Stella, Alicia Zanca, María Ibarreta y Alejandro Awada. La dirección es responsabilidad de Eduardo Gondell.

"Lágrimas en el Sahara" se impone como un cálido homenaje a los artistas del radioteatro argentino. Su trama muestra la realidad de un grupo de personajes, tanto actores como oyentes, que ven modificada su realidad gracias a aquellas teatralizaciones radiales que conmovían por su fuerte verosimilitud.

Lucía, una de sus protagonistas, cumple el rol de una princesa, y su voz conmueve a un lugareño, que decide escribirle confiándole su amor. Gracias a la radio el destino de esos seres se verá modificado.

"Yo no frecuenté mucho radioteatro -comenta Alicia Zanca, que tendrá a su cargo interpretar a Lucía-, pero recuerdo que con mi madre escuchábamos "El hombre de la máscara de hierro", que estaba interpretado por Francisco De Paula y Delfi de Ortega. Cuando leí la obra sentí que tenía que ver con ese mundo de mi infancia, de los años 50, de experiencias muy sensibles que eran esas voces que nos acariciaban con historias de amor. La gente se enamoraba de los personajes y hasta creían que existían."

Refiriéndose a las cualidades de su personaje, la actriz reconoce que se trata de "de una mujer que está totalmente desencantada de la vida. Está en una gira con un radioteatro eterno, acompañada por un hombre que la vive engañando. Su vida es una disociación porque mientras por un lado siente que todo está terminado para ella; por otro, recrea en la ficción a una princesa que habla del amor".

Construir este personaje no fue tarea sencilla para Alicia Zanca. Ella nunca había participado de un radioteatro y además Lucía posee características especiales. Para poder construirlo debió investigar el recorrido de aquellos artistas que en los años 30, 40 y 50 definían su profesión a partir del medio radial. Y además entender la conducta de una mujer alcohólica y frustrada.

Obras dramáticas

En los últimos años, el trabajo teatral de Alicia Zanca está íntimamente ligado con la producción dramática argentina. Participó en las puestas en escena de "Rápido nocturno, aire de fox trox" y "Desde la lona", de Mauricio Kartún, y "De profesión maternal", de Griselda Gambaro.

"Yo tenía un prejuicio con el teatro argentino -confiesa-. Estoy formada en la escuela de Chejov, Shakespeare, y ese teatro me enseñó mucho, porque es un teatro perfecto. Pero recuerdo que un día Laura Yusem (directora de "Rápido nocturno...") me dijo, "tu personaje no tiene nada que envidiarle a Sonia, de "La Gaviota" de Chejov...". Qué puedo decir en relación con el personaje de Gambaro... Y ahora está pieza de Menis. Veo mucho el cine de John Cassabetes y siento que Gena Rowlands se haría un festín con este personaje de Lucía".

-¿Qué te posibilitan estos textos?

-Hablar de lo que sucede desde una poética nacional, pero con obras que tienen el alcance de cualquier teatro importante. No sé si tengo ganas de hacer un teatro costumbrista, pero estos autores despegan del realismo y lo hacen con una gran fuerza. Realmente es un compromiso muy grande interpretarlos. Soy actriz, es una vocación y un oficio que elijo. Lo único que quiero es crear. Lo único que uno le pide al país es "déjenme crear porque estoy dispuesta a dar todo lo que tengo". Con estos autores, seguiría en el teatro nacional, sin duda.

Analizando cada uno de los materiales que trabajó últimamente, Alicia Zanca explica que con Mauricio Kartún tuvo la posibilidad de "rescatar un lenguaje. El es como un arquitecto del lenguaje popular con un vuelo poético muy grande y también me llevó a mi infancia porque construí el personaje a partir de una tía. Con Gambaro descubrí que el instinto no sólo basta para ser madre, hay que tener una gran responsabilidad. Y yo llevo eso a todos los terrenos, tengo una gran responsabilidad por ser actriz, profesional. Indudablemente son grandes autores que te llevan a las grandes preguntas. Y ellos ya tienen las respuestas. Por el contrario, yo tengo más preguntas que respuestas. Y, con la obra de María Victoria Menis, está la complicación de ese personaje y la complicación que significa el amor. Y ésta es una asignatura pendiente en mi caso que me gustaría, a través de la poesía y la literatura, ver si puedo resolver. ¡Quién te dice...!

-Tal vez como a Lucía alguien te escriba una carta y te declare su amor...

-Las cartas están. Se trata de saber leer e interpretar. Esta es una buena posibilidad para que me conecte con mi zona afectiva.

También el cine

Alicia Zanca acaba de filmar junto a Enrique Pinti y Carmen Maura una película también de María Victoria Menis (esta vez como directora), prepara otra producción cinematográfica junto a Ulises Dumont, Jorge Suárez y Mauricio Dayub, proyecta recrear una nuevo texto de Mauricio Kartún y hasta dirigirá, posiblemente, a Laura Novoa en un clásico. Pero de todo esto la intérprete habla poco, sólo da la información sin aportar demasiados detalles sobre cada proyecto. Se siente muy feliz por ser actriz, por poder crear en este marco de país que según aclara, no la pone nada feliz.

"Frente a esa infelicidad -dice- la respuesta es la creatividad. Uno se encierra y trabaja y hasta abre salas como Laura Yusem o Roberto Castro. La gran respuesta es ponerse más fuerte que nunca. En el teatro me siento autora, protagonista. Este país que nos proponen es muy pobre. Y yo quiero hablar de mi realidad, de lo nacional, con los autores argentinos, hablar del desencanto de este momento tan decadente respecto de los valores, y siempre hablar con poesía, eso nunca hay que descartarlo".