El gran premio de la cocina: ¿por qué se puso colorado Christian Petersen?

El gran premio de la cocina transita su octava temporada y la confianza que hay entre el jurado y quienes participan se afianza en cada jornada. Si bien la competencia aumenta a diario su exigencia, también se viven momentos graciosos, y tanto el equipo verde como el rojo se divierten con los desafíos.

Este martes la temática fue regional, y Mendoza la provincia a homenajear, con los mejores y más típicos platos. Guiso a la masa, revuelto de tomates, ojo de bife con salsa de vino y caldo de gallina fueron los menúes que debieron preparar para encandilar al jurado.

Pero la verdad es que no hizo falta demasiado porque el parrillero Christian Petersen, integrante de este triunvirato de sabor, estaba tan de buen humor que todas sus devoluciones fueron optimistas, característica no muy común en él.

Desde que arrancó el programa se notó la buena energía del cocinero, que además de dar buenas devoluciones hizo chistes y debatió sobre los distintos temas que aborda El gran premio de la cocina. Pero en la degustación del segundo plato, que era el ojo de bife, la conductora Carina Zampini frenó todo y le preguntó: "Está raro usted Petersen, le dijo cosas lindas a todos, ¿se siente bien?"

En ese momento, su colega Felicitas Pizarro, respondió por él. "Es que está enamorado", dijo refiriéndose a que el parrillero sale desde hace algunos meses con una ex integrante de El gran premio, una cocinera de 25 años llamada Paula.

Sin decir una palabra al respecto, Petersen quiso continuar con el programa, pero no pudo evitar ponerse colorado. Al hacerlo, la conductora, con quien se rumoreó durante muchos meses que tenía un amorío, pidió un aplauso por la situación sentimental del cocinero. ¿Habrá sido sincera? Por su reacción al aire, pareciera que sí.