Los chamanes conquistan París
En la Ciudad Luz, una exposición sobre estos gurúes de la cultura no occidental recibe a los visitantesjunto a un altar vudú ubicado estratégicamente para alejar los malos espíritus
PARIS.– En la Amazonia peruana, en Siberia, Corea o Estados Unidos, el chamán cura, se comunica con los espíritus y pone orden en el caos del universo. Ahora, una exposición insólita en el Museo Quai Branly de París le rinde tributo y lo hace dialogar con el arte contemporáneo.
Bautizada Los amos del desorden, la muestra en el lindísimo museo parisiense dedicado a las culturas no occidentales se centra en el papel del chamán a través de las épocas, examinando su influencia y su poder en las sociedades tribales.
El director del Museo Quai Branly, Stéphane Martin, demostró una vez más que no tiene miedo a desafiar convenciones: la exposición está protegida por un altar para alejar los malos espíritus creado por un sacerdote vudú de Togo, Azé Kokovivina.
El altar fabricado con barro, huesos, tejidos multicolores, sangre y aceite de palma se levanta en la entrada de la exhibición, que abrió sus puertas el miércoles y que se puede visitar hasta el 29 de julio.
"Creé esta obra para proteger al museo de los malos espíritus", explicó a la prensa el sacerdote-artista de Togo, durante la presentación de la exhibición.
Martin explicó cómo surgió la idea de esta muestra, que reúne unos 300 objetos utilizados en la práctica chamanística o que son representaciones artísticas de hombres y mujeres que a través de la historia y en todas las regiones del mundo usaron su magia para curar, exorcizar y conectarse con el mundo espiritual.
"El chamanismo está inscrito en las civilizaciones representadas en las colecciones del museo, y se ubica en el corazón de los patrimonios materiales e inmateriales del Quai Branly", explicó Martin.
Según el director de la institución, el museo habría podido abordar el tema de manera clásica, privilegiando el punto de vista científico, antropológico, pero explicó por qué decidieron encararlo de otra forma.
"Esa no fue nuestra opción", dijo Martin y destacó que el proyecto nació del encuentro con el historiador de arte Jean de Loisy, un "hombre brillante, atípico".
Loisy, curador de la muestra, explicó su decisión de "hacer dialogar el chamanismo con el arte contemporáneo" para demostrar que en todas las épocas, chamanes, artistas y antropólogos se plantean interrogantes similares sobre el ser humano, la vida, la muerte.
La sección que explora el tema del control del caos en el mundo muestra videos en los que chamanes de la Amazonia peruana y brasileña cuentan cómo trabajan con la magia para curar, salvar almas y viajar entre los mundos.
Otra sección explora la práctica del exorcismo, y otra está dedicada a las prácticas rituales y a las ceremonias de catarsis.
Al mismo tiempo, "las obras contemporáneas incluidas en la muestra son testimonio de que las cuestiones ancestrales que se planteaban y se siguen planteando los chamanes en todo el mundo tienen una resonancia actual", dijo Loisy.
"El artista, como el antropólogo, explora las cuestiones intemporales de la condición humana", afirmó el historiador de arte frente a una veintena de artistas modernos y contemporáneos que realizaron obras que evocan el tema del caos del universo y los intentos vanos de dominarlo.
Obras de artistas como Jean-Michel Basquiat, cuya obra fascinante y compleja se nutrió del vudú y de la cultura de su padre haitiano, y del alemán Joseph Beuys, que una vez después de un accidente fue curado por chamanes, figuran en la muestra, que incluye también piezas de arte prehispánico, estatuas de la época faraónica y esculturas africanas y asiáticas.
"Desde el principio de la aventura del hombre, las mismas preguntas animan el soplo creador de grandes artistas", resumió el antropólogo Bertrand Hell, consejero científico de la exposición y autor del libro Los maestros del desorden, que da nombre a la muestra.
"Al hacer dialogar obras contemporáneas con objetos etnográficos quisimos provocar asombro y una mirada más profunda sobre cómo esas preguntas sobre el desorden y el control del caos y de la catarsis gravitan desde siempre sobre la conciencia humana", concluyó el experto.
Fuente: AFP
Ana María Echeverría