El músico acompañó en cuatro canciones al grupo de Joaquín Levinton el sábado por la noche en el Teatro Vorterix
“Olé olé olé olé, Charly, Charly”, cantaba el sábado el público de Turf en el Teatro Vorterix cerca de las 23. La banda acababa de terminar el tercer bloque de canciones de la presentación de Odisea, su nuevo disco, y para ese momento, el rumor de la visita de Charly García —que circuló desde la tarde— ya era vox populi entre los presentes. Cuando empezaron a sonar los primeros acordes de “King Kong”, el telón rojo se abrió y ahí apareció Charly, sentado en medio del escenario con sus dos teclados. Junto a Levinton y compañía, interpretó una versión íntima de este tema de Kill Gill (2010), una fija en el setlist de la versión 2018 de Charly, que sirvió como inicio de una seguidilla de cuatro temas. El encuentro, que ya se había postergado varias veces, fue una muestra de la amistad consolidada que empezó en Cathedral, el estudio que Turf tiene en Villa Ortúzar y donde el ex Sui Generis grabó Random (2017). Dos miembros de Turf, Nicolás Ottavianelli y Fernando Caloia, colaboraron en el último disco de García.
“Arrancó la destrucción”, dijo Charly antes de estrenar junto a Turf su cover de “Substitute”, el single que llevó a The Who a la cima de los charts del Reino Unido en 1966. Cada tanto Levinton, —que lo acompañó en voz — se acercaba a mirar la letra de la canción en una hoja apoyada en uno de los teclados de Charly que les sirvió a los dos como un ayuda memoria. Siguieron “Chiquilín”, de La Hija de la Lágrima (1994) y “Me Siento Mucho Mejor”, el tema de The Byrds que Charly convirtió en un clásico del rock argentino en Filosofía Barata y Zapatos de Goma (1990). Esta vez García se enfocó en tocar. Sin palabra de por medio, pasó de una canción a otra, con entusiasmo, sólido, casi sin olvidar las letras. En unos minutos, el show pasó de ser la simple presentación de un disco a una noche inolvidable.
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