Música. Las chicas del reggae
Nuevas exponentes del género jamaiquino que traen una sensibilidad distinta en sus letras y proponen fusiones osadas con otros géneros, como la cumbia y el soul
"Creo que la mujer tiene como esa impronta de fuerza creadora, como si fuera una línea de ovarios que está ahí puesta en el escenario y enciende un fuego distinto", dice Paz Ferreyra, ideadora del proyecto musical Miss Bolivia y una de las voces femeninas que, sin duda, supo encender el reggae vernáculo.
Junto al de ella, también resuenan los nombres de las ya consagradas Mimí Maura y Alika y de otras artistas emergentes como Gabriela Jurado, de Contravos, y Anabella Orellano y Ana Sol Torroixa, de Anasol y la Candela, entre muchas otras.
Con influencias del dancehall , el ska, el soul y el rocksteady (precursor del reggae), estas artistas saben resignificar el género e interpelarlo. Con letras combativas y de gran contenido espiritual, las chicas renuevan las convenciones temáticas y lo interpelan, incluso, con inesperadas fusiones. "Desde el vamos, ya lo que le aporta la mayor presencia femenina es que la balanza de los hombres y las mujeres en el escenario, con el micrófono en la mano, sea un poco más representativa de lo que es el público. Las mujeres tenemos muchas cosas que decir", dice Paz Ferreyra.
"El que está ahí arriba es un canal, no importa si es un hombre o una mujer. Por otro lado, la mujer aporta enriquecimiento de contenidos y de lírica. Yo antes había visto el panorama un poco más religioso. Era necesario hablar de otras cosas. Si no, estábamos en un loop del que no se sale", agrega la creadora de Miss Bolivia.
La cantante, que asegura estar vinculada con la música desde que tiene "uso de razón", empezó su camino en el reggae luego de haber transitado otros géneros, como el pop y el rock, y cuenta que cuando comenzó a escuchar dancehall, uno de los derivados del reggae, sintió una suerte de amor a primera vista: "Del reggae en Latinoamérica derivaron varias cosas: el reggaetón y el dancehall, por ejemplo. Cuando empecé a escuchar todos esos ritmos lentos, mántricos, dije: yo quiero tocar eso".
También Gabriela Jurado, quien creó la banda Contravos en 2008, junto con su pareja, el tecladista Marcelo Telechea, cuenta que su amor por el reggae nació en ella desde temprano. "Ser una líder femenina le aporta calidez al género. En mi caso, lo que me interesa es que se note que hay música y que también hay un mensaje, más allá de que puedan oír una voz femenina cálida", dice la cantante cuya banda fue telonera de Manu Chao en 2009 y, recientemente, de Cultura Profética.
Para la líder de Contravos, la escena del reggae femenino en la Argentina es cada vez más prolífica y destaca que se enmarca en un fenómeno que se dio ya a nivel internacional de la mano de referentes como Judy Mowatt, Lauryn Hill y Rita Marley y, más recientemente, de Dezaire.
Ana Sol Torroixa, de Ana Sol y La Candela, también transita el reggae desde hace ya un tiempo: "Yo soy percusionista y cuando empecé a tocar música negra y africana, descubrí el género. Me enamoré del reggae porque es una música muy espiritual... A los 15 años ya empecé a pasar música reggae", cuenta la cantante que lideró la banda Un Kuartito, con la que exploró también el ska, el dancehall y la cumbia.
"Cuando decidí encarar mi proyecto solista, quise también hacerlo con esos mismos géneros. Creo que las letras de las cantantes femeninas están marcadas por otra sensibilidad. Igual tampoco creo en dividir tanto, porque hombres y mujeres nos comunicamos diariamente", dice Ana Sol.
Por su parte, Anabella Orellano, una cantante que incursionó en varios géneros de música negra, sostiene que las mujeres aportan "otra sensibilidad, otras letras y otros colores" y que "algo se pone más suave". Sin embargo, aclara que, pese a ser una gran admiradora del reggae, su búsqueda la aleja de los rótulos y las fórmulas convencionales: "Me encanta el reggae, pero no me gusta que me etiqueten. Hacemos música. En este momento de mi vida me encuentro con estos ritmos, pero no me gusta la etiqueta –dice Anabella–. Me identifico también con el soul, y con toda la música con raíces negras. Trato de mostrar la mezcla entre reggae y soul. También, antes, escuché mucho rocksteady, que fue lo primero del reggae. Después vino la connotación".
El diálogo con otros géneros
Son varias las cantantes que optan por establecer un diálogo entre la sonoridad jamaiquina y otros géneros de nuestro continente.
Ana Sol, por ejemplo, también decidió incursionar en la cumbia y sostiene que, por la cadencia de ambos ritmos, pueden "ensamblarse muy bien".
Miss Bolivia coincide en observar que las fusiones de géneros enriquecen y revitalizan la producción artística: "Yo no hago mierda al reggae, pero lo interpelo. Yo creo que desde el momento en que vos al reggae le hacés una pregunta desde la cumbia o desde el rap, lo sacás de su monotonía y de su hermetismo de género y le estás inyectando vida, lo estás haciendo dialogar con tu raíz y con tu pueblo", dice, y agrega que puede establecerse un paralelismo entre el terreno que ganaron las mujeres en el reggae y el que obtuvieron en otros géneros musicales: "Yo no caí de la nada. Hubo muchas mujeres que vinieron antes e hicieron cosas re grossas: María Elena, Sandra y Celeste, las chicas de Actitud María Marta. Ahora hay mujeres en la cumbia que son rezarpadas.
A mí me encanta Dalila, Karina. Después está la nueva escuela de las chicas, como Las Culisueltas, Nena Mala, que también son paisajistas, como nosotras".
ENTRE LA MÚSICA Y EL DOLOR
"Estoy pasando una situación personal complicada –cuenta Ana Sol Torroixa–. Mi hermano (Juan Pablo Torroija) murió hace un mes. Vivía en España, era militante, formaba parte de los "okupas" y también de los indignados. Supuestamente hubo un intento de hurto, pero no sabemos si fue así. Estuvimos tres semanas buscándolo, hasta que logré dar con un amigo de él. A ese amigo le dijeron que había sido detenido, luego le dijeron que estaba en el hospital y que había muerto, supuestamente por un intento de suicidio. Pero en esa comisaría donde lo detuvieron, murieron otras personas de la misma manera. Que haya tantos casos similares es muy extraño".
Por estos días, la cantante viajará a España con el objetivo de acercarse a la verdad sobre la muerte de su hermano.
En medio de su tragedia personal, encuentra en la música un refugio y un espacio de lucha: "La música es un lugar de militancia desde el cual uno puede modificar muchas cosas. Se conoció mucho lo de mi hermano porque mucha gente se solidarizó conmigo".
La muerte de Juan Pablo sucedió mientras Ana Sol preparaba el lanzamiento de su nuevo disco al que, ya a fines del año pasado, dio en llamar Justiciera.
LAS PRÓXIMAS FECHAS
- Contravos
Presenta su disco Actor-Espectador . El viernes, a las 21, en La Trastienda, Balcarce 460. - Ana Sol
Se presenta en la Fiesta de la Flor. Viernes 21, a las 22, en La Iglesia, Suipacha 842. - Anabella Orellano
Jueves 13, a las 21, en Bar Nesta, Tiscornia 803. San Isidro. Entrada libre y gratuita. - Miss Bolivia
Junto a EstaCatto. El sábado, a las 23, en el Club La Paternal, Fragata Sarmiento 1951.