Roma, al ritmo del 2x4
ROMA.- Once de la noche de un día de semana, la luna resplandece en el cielo y reina un clima de fiesta en el Auditorium Parco della Musica, donde acaba de inaugurarse la primera edición del Festival Buenos Aires Tango en esta capital.
En la "cávea" (graderías al aire libre que evocan un anfiteatro romano) de este moderno complejo cultural diseñado por el arquitecto Renzo Piano está lleno de gente enloquecida con la milonga. Al ritmo del 2x4, no sólo se exhiben bailarines profesionales, sino que también hay varias parejas de tangueros venidos de toda Italia que se zambullen, llenos de pasión y sin ningún pudor, en eso que consideran la "danza más sensual del mundo".
En el aire de una noche cálida de fin de verano se respira tango puro. Se oye música, se ve baile y en las paredes se ven viejos afiches de milongas porteñas y fotos. En el bookshop no sólo hay libros, películas y CD de tango, sino que también se venden sensuales zapatos de taco alto, imprescindibles para bailar. Y el público italiano, desde siempre enamorado del tango, está fascinado: por primera vez, directamente de Buenos Aires y gracias a un acuerdo cultural entre la ciudad de Roma, la región del Lacio y el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, el tango ha llegado con todo.
Por dos semanas -hasta el 24 del actual- habrá música, danza, milongas, cursos de tango, seminarios, conferencias, muestras y hasta gastronomía, todo de primer nivel y auténtico.
"Yo bailo tango desde hace diez años, amo el tango, y ya estuve dos veces en la Argentina", cuenta a LA NACION Enzo Marchetti, un romano de 65 años tan enamorado de nuestro país que en la localidad de Pisoniano, a 50 kilómetros de Roma, tiene un restaurante que se llama La Pulpería.
"Los italianos amamos el tango y lo entendemos porque eso de vivir el barrio es como vivir en la periferia de Roma", explica, entusiasmado, mientras se apresta a ir a la milonga junto con su pareja, Bruna Bruciolini.
Enzo y Bruna acaban de presenciar Diez años de tango , el espectáculo de la impecable orquesta El Arranque, que cautivó al público que llenó la sala Sinopoli. "Fueron bravissimi !", comenta Bruna.
El más ovacionado
Durante la función, el más ovacionado fue el gran maestro Raúl Garello, uno de los mejores bandoneonistas del país y compositor. Aunque también se llevaron varios aplausos los cantantes Ariel Ardit y Noelia Moncada, por sus voces impresionantes, así como los impecables bailarines Esteban Moreno y Claudia Codega.
Ellos son sólo algunos de los más de cincuenta artistas porteños que han llegado hasta esta capital. Los tangófilos italianos, en efecto, en estas dos semanas de festival también podrán ver Grotesca pasión trasnochada , de la Compañía No Bailarás; Florece , del Ramiro Gallo Quinteto; Argentina, escenas en big band , del Parco della Musica Jazz Orchestra, de Javier Girotto; Entre Agustín Bardi y Carlos Gardel , de la Orquesta Vale Tango; así como la Orquesta Escuela de Tango, dirigida por una de las personalidades más representativas del tango: el maestro Emilio Balcarce.
"Estar acá es muy bueno; el público italiano es superpasional, somos más familia con los italianos que con los españoles, y, si bien cambia el paisaje, es como estar en Buenos Aires", dijo a LA NACION Roberto Herrera, considerado uno de los mejores bailarines de tango del mundo. Junto a su pareja, la deslumbrante Tamara Bisceglia, Herrera en estos días intentará revelar, a través de varias coreografías, los distintos modos de bailar el tango.
Sin ocultar su entusiasmo por esta primera edición del Festival Buenos Aires Tango, a más de 13.000 kilómetros de distancia, su director artístico, Carlos Villalba, contó que los italianos también pueden vivir el Tango Club, un espacio que recrea la atmósfera de los boliches porteños, donde se puede apreciar a artistas como Lidia Borda o Aureliano Marín, "la revelación del año con su fusión de tango y jazz".
"Cuando una crisis económica tremenda casi destruye el país, fue nuestra identidad cultural lo que nos permitió seguir siendo un pueblo", dijo en una conferencia de prensa el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Telerman, que asistió a la inauguración de lo que definió como la "principal muestra de tango que hay en el mundo".
Telerman, que aseguró que a partir de esta iniciativa los niveles de cooperación cultural entre Buenos Aires y Roma seguirán creciendo, destacó que el festival "es mostrar lo mejor de la Argentina". "Lo peor -agregó- lo dejamos en casa."
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