Entrevista con Luis Fonsi. Un cantante que va "paso a paso"
El intérprete puertorriqueño actuará, mañana, a las 21, en el Luna Park
Es 2005 y el cantante Luis Fonsi se acaba de enterar de que su novia, la actriz puertorriqueña, Adamari López, padece cáncer. Al conocerse la noticia, su teléfono no para de sonar. "¿Qué van a hacer?", le preguntan sus familiares y amigos. El les contesta que hay que ir de a poco, paso a paso. Unos días después, toma su guitarra para componer y lo único que se le viene a la cabeza es esa frase, paso a paso, que no sólo da nombre a su último CD sino, también, a su gira de presentación por América latina, España y los Estados Unidos. Esas palabras serán las que, mañana, a las 21, sonarán en el Luna Park y el 6, en el teatro Broadway de Rosario.
A esa frase Fonsi la hizo su bandera, a los 6 años, en su Puerto Rico natal, cuando descubrió que quería ser artista al ver el furor que generaba en el público su grupo de música preferido, Menudo. Desde ese momento comprendió que, para llegar hasta ese lugar, había que ir paso a paso. "En la vida uno tiene que caminar y no correr", dice a LA NACION, hoy 22 años después.
Ese sueño infantil se retrasó un tanto. Cuando él tenía 10 años, su familia decidió que la tierra prometida no era Puerto Rico, sino los Estados Unidos, más específicamente, Orlando. Para el niño Fonsi (un acortamiento de Alfonso, su segundo nombre) adaptarse no fue tarea fácil; sobre todo cuando hablaba porque su acento puertorriqueño contaminaba su pronunciación anglosajona.
En los Estados Unidos empezó su formación musical, de a poco, paso a paso. Los discos de Stevie Wonder, Boyz II Men y lo mejor del rhythm and blues comenzaron a sonar en su casa. Sin embargo, no se olvidó de su raíz latina; escuchaba Ricardo Montaner, Juan Luis Guerra y Franco De Vita. "Esa mezcla de música es lo que define mi estilo", señala.
Cuando llegó a la Universidad de Miami, para estudiar canto, comprendió que podía escribir sus propias canciones. "La composición vino de manera natural. No era una meta. Poco a poco, me fui atreviendo", explica. Tanto se atrevió que en su último disco, ocho de las once canciones son suyas. "Ahora es una especie de adicción", agrega.
Su tránsito como compositor y cantante por los Estados Unidos lo llevó a hacer de telonero en la gira de Britney Spears y a cantar frente al mandatario George W. Bush, en los actos por los atentados del 11 de septiembre, en la Casa Blanca. "No voy a decir que es un mal presidente, pero no estoy de acuerdo con muchas cosas que ha hecho", dice. El prefiere mantenerse lejos de ese mundo. "La política y la música no se mezclan", justifica.
-¿Cómo va a ser el show de mañana?
-Recorreré todas las canciones desde mis comienzos hasta hoy. No piensen que va a ser un concierto de puras baladas o de puro baile. Pienso que un concierto debe ser una montaña rusa de emociones. Es decir que habrá momentos íntimos, pero también otros de mucha energía. Estoy contento porque hacer un Luna Park es importante, es muy bien visto en el extranjero.
-Después del show de mañana, el 6 estarás por Rosario. Te van a quedar unos días libres...
-Es la primera vez en seis años que vengo a la Argentina y que tengo días libres. Justo en este momento hay amigos que residen en los Estados Unidos y que están aquí. Así que aprovecharé para visitarlos.
-Cuando componés, ¿pensás en el mercado latino o en el anglosajón?
-Es exactamente lo mismo; lo que cambia es el idioma. Musicalmente, no son dos mundos diferentes.
-Dado el tiempo que llevás viviendo en los Estados Unidos, ¿te sentís más norteamericano que latino?
-Soy latino, puertorriqueño ciento por ciento. Los latinos que viven fuera de su país están orgullosos de sus raíces. El amor por mi tierra y por sus costumbres se intensificó desde que estoy lejos de ella.
-¿Cómo ves el trato que se les da a los latinos en los Estados Unidos?
-Cuando me mudé allí, fue difícil porque siempre te ven como extranjero. Soy puertorriqueño y, por lo tanto, en teoría soy norteamericano. Pero para ellos eso no importa, sigo siendo extranjero. Sobre todo al tener este color de piel marrón. Nunca sufrí el problema del racismo, pero ese conflicto existe. Y ahora este tema es muy delicado.
- Cantaste frente al presidente Bush, en un acto por el 11 de septiembre. ¿Cómo fue eso?
-En ese momento, era 2001, Bush no era tan odiado y todavía no estábamos en guerra. Prefiero reservarme la opinión que tengo sobre él. No voy a decir que es un mal presidente. Pero no estoy de acuerdo con muchas cosas que ha hecho, como la guerra.
-En 2005, estabas grabando el disco "Paso a paso" cuando Adamari se enfermó...
- Que a tu novia, a tan temprana edad, le diagnostiquen cáncer es una noticia fuerte y difícil de digerir. Pero nos aferramos uno al otro y nos vestimos de mucha fe y de fuerza. Ahora su enfermedad está bajo control. Por esta situación compuse "Paso a paso". Dije tantas veces esa frase que cuando me senté a componer lo único que me salió fue eso.