La actriz fue mamá en julio, y ya volvió a mostrar su escultural figura en las alfombras rojas
Sienna Miller está de vuelta. La bellísima atriz ha elegido la 20ª edición del festival de cine de los Hamptons para hacer su reaparición estelar y presentar su nueva película, The Girl, un biopic sobre el director Alfred Hitchcock (papel que interpreta el actor Toby Jones) en el que Sienna da vida a Tippi Hedren.
Radiante y espectacular con un diseño blanco de Alessandra Rich, una versión del vestido con el que Gwyneth Paltrow causó sensación en los premios Oscar, que combinó con unos brazaletes dorados y su característica melena rubia ligeramente ondulada, la actriz, de 30 años, se mostró de lo más risueña y simpática, algo que no es de extrañar ya que se encuentra, sin dudas, en uno de sus mejores momentos a nivel personal.
Hace apenas tres meses, en julio, la actriz y su novio Tom Sturridge vieron nacer a su hija, Marlowe, y podemos ver una vez más la asombrosa capacidad de las diosas de Hollywood para recuperar su figura en tiempo récord, ya que no hay rastros de los kilitos de más que toda embarazada acumula tras nueve meses de dulce espera.
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