Rolling Stones, en la Argentina: aquel histórico encuentro con Dios (Jagger) y con el Diablo (Richards)
Frases que dejaron el cantante y el guitarrista en una entrevista exclusiva con LA NACION, en su segunda visita al país, en 1998
En marzo de 1998, en medio de su segunda visita al país, Mick Jagger y Keith Richards hablaron cara a cara con Adriana Franco, para el suplemento de Espectáculos de LA NACION. Aquí, textuales de dos entrevistas históricas realizadas en habitaciones separadas del hotel Hyatt de Buenos Aires 18 años atrás.
Mick Jagger dixit
El concepto del Bridge to Babylon Tour. "Empezamos con muchas ideas diferentes, siempre tratando de no volver a lo viejo. Esta vez, después del Voodoo Lounge Tour, que era bastante moderno, pensamos que teníamos que hacer que el escenario y la presentación del show en general fueran de alguna manera más operísticos y tratar de definir actos y situaciones entre los actos. Comenzamos a imaginarlo y vimos cómo funcionaba eso. Después tuvimos que concentrarnos en pensar cómo iban a verse realmente todas esas ideas, cómo ibamos a tratar el escenario y cómo hacer que la pantalla encajara en esto sin ser lo mismo de siempre. Luego comenzamos a hacer el verdadero diseño, que incluía el puente y las luces. Trabajamos entre seis y nueve meses"
Cómo renovar la energía para cada show después de tanto tiempo. "Es la parte más difícil. Aunque hay varias cosas que ayudan, los músicos por un lado, pero sobre todo es el público el que lo logra. Cuando mirás y ves que la gente se entusiasma sucede una suerte de comunión. Ese es el asunto, la comunión. A veces no estás bien y el público te hace levantar, otras veces se da al revés, un público poco entusiasta hace que la banda se enfríe. Aquí, en 1995, fue impresionante"
Shows de estadio. "Creo que la música es muy importante. Pero no hay que olvidar que es un show y no un club de jazz. Incluso hemos tocado en pequeños teatros en Europa y en los Estados Unidos y la gente mira, no sólo escucha. Somos los Rolling Stones y van a vernos, somos una banda para ver, no sólo para escuchar. Así que, si tocamos en lugares grandes tenemos que hacer shows grandes y, para ser honesto, me gusta hacerlo".
Cantar junto a Dylan. "Ya tocamos con él en 1995, en la ciudad francesa de Montpellier, donde hicimos un dueto con "Like a Rolling Stone". Y hace muy poco, en enero, tocamos juntos, aunque en distintas salas, en el Madison Square Garden, de Nueva York. En esa ocasión se suponía que él iba a venir sobre el final de nuestro show, pero se le hizo tarde. Después vino a los camarines a decir sólo eso, que se le hizo tarde, pero sabés, no es la persona más fácil del mundo".
Rock and Roll por siempre. "Es difícil para la gente del rock aceptar el hecho de que se crece y de que hay gente haciendo rock con más de 50 años. Pero esto implica también un crecimiento musical. Cuando los jóvenes comienzan a tocar lo hacen de una manera muy simple, porque es música simple que no necesita demasiada técnica. Es lo que hace atractivo al rock and roll, que cualquiera puede tocarlo, comparado con el jazz, por ejemplo. Si querés tocar jazz tenés que tener mucha más técnica, y mucho estudio. En cambio, cualquiera puede tocar rock and roll. A la vez pienso que esa gente que comienza a tocar está influenciada por las viejas bandas, por Led Zeppelin o Pink Floyd. Al comenzar tenés que tener una idea de cómo querés sonar. Uno tiene una banda favorita que, seguramente, no es la que surgió el año pasado, porque de ellos sólo podrías tener un solo álbum".
Gustos musicales. "Me gusta todo, menos la ópera que no me gusta mucho. Escucho pop, jazz, blues, folk, clásica. A veces me hablan de alguna banda que no conozco y la compro para ver qué es".
Keith Richards dixit
Argentina. "Estoy feliz de estar aquí de nuevo. Me reciben tan bien, me hacen sentir muy bien. La Argentina es un país muy agradable para mí. Es mi tercera visita, la primera fue con los XPensive Winos, y me hicieron sentir tan a gusto que no lo pude creer. Supieron escuchar tan bien el show que cuando volví le dije a Mick "cómo es posible que todavía no hayamos ido allí con los Rolling Stones. Ha sido increíble con los Winos, no puedo ni imaginar cómo podría ser con los Stones. Tenemos que hacerlo". Un par de años después lo hicimos. Y aquí estamos de vuelta. Felices. Es hermoso. En este país sí que la pasan bien, todo el mundo disfruta las canciones".
Una antena. "Me parece muy aburrido cuando la gente dice que escribió algo, "esto es lo que yo he creado", dicen con orgullo. ¿Qué es lo que se creen? Para mí la música es parte de tu corazón, una forma de nexo, una parte de la vida. Jamás me siento con la idea de que es tiempo de escribir una canción, eso no funciona para mí. Yo tomo un instrumento, a veces la guitarra, a veces el piano y toco mis canciones favoritas, cosas de Muddy Waters, Buddy Holly, Little Richards y trato de aprender algo. Y ahí, a veces, algo aparece, probablemente cuando cometo un error. La mayoría de los músicos se enojan cuando se equivocan. Yo, en cambio, veo algo interesante en los errores, y en saber reconocer los accidentes. Ahí es cuando quizá recibís algo. Es una manera de verlo, y decir, esto no es un error, esto es una nueva canción. Entonces es tiempo de trabajar, de lustrarla un poco, hacerla encajar y luego la transmitís. Jamás creí en esa cosa de la creación, le dejo eso a Dios, él es el que lo sabe todo, es el experto del departamento de creación (risas)".
La música. "No me gusta pensar la música como géneros. Toda la música se conecta entre sí, no me importa si es mariachi o Mozart o tango, o rock and roll o jazz o blues. Todos esos nombres significan muy poco, básicamente son un invento de la industria para vender más fácil. Pero eso no tiene nada que ver con la música, todo es música y para mí la diversidad es lo más interesante de todo. La verdadera pregunta es por qué la gente está tan interesada en la música. Y nadie puede responderla, para mí ese es el misterio. Mirá otras formas del arte, mirá ese cuadro ahí en la pared, solamente puede existir dentro de ese marco. Mirá un libro: tapa, el principio, el fin. La música, en cambio, no tiene marcos, no tiene tapas, es como una caja de Pandora, una vez que la abrís, no sabés qué pasará, ya no podrás contenerla más. Tal vez la razón sea que nos une, nos iguala. La música y probablemente los blue jeans (risas)".
Ningún plan. "Jamás hago planes. No me gusta. Y siempre que los hago, no suceden (risas). No me gusta planear, me gusta que las cosas pasen. Ni siquiera soy bueno para el juego, puedo ver un partido de fútbol, pero quien gane ese día ha de ser el que juegue mejor ese preciso partido. No puedo predecir, ni quiero. Para mí la necesidad de predecir demuestra inseguridad. Porque quieren saber qué es lo que pasará. A qué caballo ponerle la plata, y quizás elegís bien pero cuando salís te pisa un ómnibus. Ganaste, pero también perdiste, porque no podrás recoger la plata ya que estás muerto. Lo que más me gusta de la vida es que sea impredecible, que no sepás qué hay al dar vuelta en la próxima esquina. La gente quiere saber qué va a pasar. Y por eso hablan de cielo e infierno, pero nadie sabe. Y eso es lo mejor para mí.
Su estadía en el país. "He pasado unos días de campo, en Lobos, aprendiendo algunos secretos argentinos. Secretos como dejarte fuera de juego con un cuchillo en la garganta. Es divertido ser gaucho por un rato y después tocar en un show de rock and roll".
Bridges to Babylon. "Es un concepto rastafari. Ellos lo usan como un término para el mundo exterior. Babylon es negocios, transas, sí jefe, no jefe, el mundo comercial. He estado mucho en Jamaica, durante muchos años y allí he podido respirar aire fresco espiritualmente, no como algo religioso. Es más bien una conexión con la tierra, con el mar, con lo que nos rodea, con cada una de las personas de alrededor. Tratar de hacer las cosas lo más simples y puras que sea posible y no complicar. Pasarla bien".
El rap. "Realmente podría vivir perfecto sin el rap, pero en ese caso no estamos hablando de música sino de mala poesía. Creo que no va a durar mucho porque se están matando entre ellos. Que es lo que más les gusta hacer".
Shows grandes vs. shows pequeños. "Los lugares grandes siempre son un desafío. Nunca sabés lo que puede pasar, especialmente los que son al aire libre. Estás por comenzar y llueve, o hace mucho frío, o hay viento. Es impredecible. Y por lo tanto me gusta. Pero a la vez, también me gustan los lugares chicos, donde estás cerca de la gente. Se escucha de otra manera, más parecido a cómo fueron hechas las canciones, como una banda de garage. De ahí es de donde venimos y es el estilo de las canciones. El desafío en los lugares grandes es hacer que esto siga sucediendo, lograr que los que están en un estadio se sientan en un pequeño bar, que, al terminar el show te hayas olvidado que estás en un estadio de futbol. Ese es el asunto".
Ron Wood. "Ronnie y yo, y también me pasa con algunos otros guitarristas, no somos uno guitarrista líder y el otro guitarrista rítmico. No, cuando uno comienza a tocar una parte líder, el otro baja y lo sostiene rítmicamente. Ronnie y yo lo llamamos el antiguo arte del entretejido. Nos alternamos, nos buscamos, y nos sostenemos. Nos cruzamos (lo muestra más con sus manos que con las palabras), y la música fluye. Es muy cambiante, muy jazz. La improvisación es una parte muy importante del rock and roll, algo que muchos no aceptan y tratan de sonar igual que en sus discos".
Seguir tocando sus clásicos. "Todavía le estoy descubriendo cosas a "Satisfaction" o "Jumping Jack Flash" o "Brown Sugar" y por eso se mantienen vivas y se sienten frescas, porque nunca se las toca igual dos veces. A mi manera de ver, tendrías que tocar las canciones en la ruta, por unos años, y recién entonces grabarlas, pero la industria de la música es negocio y te dicen "para cuándo tendremos nuevas canciones, bla, bla". Y entonces uno las graba y todo el mundo las escucha pero uno sabe que es todavía solamente un embrión. Y si es una buena canción nunca terminarás de aprenderla y descubrirle cosas".
Charlie Watts. "Charlie es el más importante de la banda, el no estaría de acuerdo conmigo, pero yo se lo digo. Es la referencia para todos nosotros. El es el hombre".
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