La magia del circo para una ópera de alto vuelo

Una niña observaba deslumbrada lo que sucedía en un terreno baldío muy cerca de su casa cuando llegaban a su pueblo, en la provincia de Santa Fe, algunas de esas compañías de circo ambulantes que abundaban en la década de los cuarenta y cincuenta. Se instalaban por unos días y se dedicaban a presentar espectáculos modestos que incluían números de acrobacias, malabares y pequeñas obras de teatro. Al pasar el tiempo esa misma niña decidió dedicarse a hacer teatro, más concretamente ópera, para lo cual fundó una compañía. Ana D'Anna lleva casi veinte años al frente de Juventus Lyrica y con esta puesta conjunta de Gianni Schicchi y Pagliacci que se estrena hoy en el Teatro Avenida quiere de alguna forma rendir homenaje a todas esas compañías que marcaron su niñez y también a todos aquellos que aún hoy continúan trabajando como artistas itinerantes en plazas y espacios públicos.

"Quise mostrar estas dos obras como si fuesen una sola y decidí situarlas dentro de un circo. Gianni Schicchi tiene la misma duración de las obras que se presentaban en las compañías itinerantes y por eso será el circo de Pagliacci quien la presente. Vamos a ser espectadores de cómo ellos interpretan la que a mi entender es la más grande de todas las óperas bufas. Estará situada en la época de Dante, tal cual la concibió el compositor. Al finalizar la función, el circo instalado en el pueblo se convierte nuevamente en protagonista y la ópera de Leoncavallo arranca casi sin darnos cuenta", explica D'Anna.

A diferencia de una ópera convencional, aquí todo comienza antes de que suba el telón y de que el director musical le dé la indicación a la orquesta. El público se va a encontrar con música y cantantes en el vestíbulo del teatro. Luego, a medida que se vayan sentando, acróbatas y malabaristas en escena irán armando el espectáculo. Serán dos payasos quienes harán el anuncio formal de que las óperas están por empezar. "No sé si puede llamársele escenografía, creo que más bien lo que hice fue una ambientación evocadora. Por eso las carpas llevan los colores azul y verde que significan los colores del recuerdo. El piso es rojo por el infierno de Dante, de la sangre que se derrama y por el dolor de todos esos artistas anónimos que entregaron tanto. El pequeño escenario es color arena, como la tierra en la que se instalaban, y los veremos colgando ropa en sogas y armando sus trapecios como lo hacían en los pueblos que visitaban. Siento que es asomarme un poco a lo que veía de niña y que tanta magia me producía", dice la directora.

Juventus Lyrica ha sido una usina de talentos y sus producciones ideales para aquellos que quieran acercarse al género de la ópera por primera vez, y este caso no es la excepción. Con elencos diferenciados para cada título, casi todos son debutantes en los roles. "Es un reto trabajar en simultáneo dos óperas con sus elencos dentro de una misma producción y a la vez darles unidad. Pero cuento con el apoyo incondicional de Antonio Russo, el director musical, quien hizo un trabajo acabadísimo y el resultado con los cantantes ha sido impecable", afirma D'Anna.

La ovación luego del aria "Vesti la giubba" hace olvidar que todavía no ha sido el estreno, y es porque los ensayos de Juventus se viven casi como una función regular. "Desde hace varios años tenemos un plan llamado Juventus Hace Escuela, cuyos resultados han sido maravillosos. Dos meses antes de una producción se manda material explicativo a diferentes escuelas para que lo vayan trabajando. Así, cuando vienen a presenciar el ensayo llegan con la ópera sabida y la disfrutan y aprecian mucho más", dice la directora.

El vestuario tanto para la historia de fraude y mafia que sucede en Gianni Schicchi como para el circo y la comedia de Pagliacci lo realiza María Jaunarena. Para D'Anna, dentro de una onda payasesca y desopilante representan muy bien la época en la que está situada cada obra. "Soy de las que creen que el régisseur no puede ponerse por delante de la obra, ese no es mi tema. No son el centro de la obra, como tampoco lo es el director musical. Quienes lo son como concepto son los cantantes actores. Son ellos el puente con el público, lo que hacemos nosotros es poner la bandeja de plata para que esto suceda", añade.

D'Anna sabe que, a pesar de los problemas, el teatro es algo que no va a morir. "Ese rito transformador de verse reflejado con lo que a otros les sucede en escena no podrá ser reemplazado por nada. No es tangible, pero hace crecer a los pueblos. Además, tendríamos que darnos cuenta de que el arte es uno de los mejores recursos que tiene este país y si lo apoyaran traería mucha plata. Yo no me rindo, así que ya estamos preparando Hamlet para noviembre y nuestra celebración de aniversario el año próximo", concluye.

Gianni Schicchi y Pagliacci

Óperas de Puccini y Leoncavallo

Teatro Avenida, Av. de Mayo 1222

Hoy, el jueves 30 y sábado 1° de septiembre, a las 20, y domingo, a las 17.30.

Desde $200