Leticia Vetrano, una actriz y clown para prestarle atención
La intérprete, de formación circense, recuerda su periplo europeo y la creación del entrañable personaje María Peligro
Todo comenzó en Trastévere, a la intemperie, en la plaza del emblemático barrio romano, cuando tenía 21 años. En pleno 2001, mientras la Argentina atravesaba una gran crisis económica, después de haber cruzado el Atlántico, y tras una breve estancia en Madrid, se produjo el primer chispazo, un romance que hoy late bajo techo en el Abasto porteño. Poco después del nacimiento de ese amor por el arte callejero, en Bruselas, Leticia Vetrano, payasa, acróbata y actriz, daba a luz al delicioso personaje de María Peligro, quien cosecha admiradores a fuerza de una inmensa destreza física, ternura y humor. El llamado "de boca en boca" vuelve a demostrar su poder en Fuera!, en la que Vetrano lleva a escena a esta entrañable criatura al son del clown.
Vetrano tiene una vaga imagen de la primera vez que fue al circo Rodas con su papá, cuando era apenas una niña, en Avellaneda. Quedó fascinada por los colores y las formas que se reflejaban a través de un caleidoscopio. También recuerda que su mamá le dijo que el circo la ponía triste, mientras la payasa pensaba: "Quiero ser grande para irme de gira con ellos". Este sueño se cumpliría años más tarde.
Fue bajo el cielo romano, rodeada de gente y ruido, donde María Peligro dio sus primeros pasos: "El hecho de haber salido a guerrear a la calle, a pelearla, a pasar la gorra, a estar atenta a la música y al público me enseñó todo lo que sé". Después de permanecer tres años en Italia, país que recorrió de punta a punta, Vetrano partió hacia Bélgica, seducida por el espacio experimental y de investigación de Bruselas, L'Espace Catastrophe. Luego vendría la presentación en varios festivales y varias giras con compañías circenses.
A fines de 2013, María Peligro comenzó su adolescencia y empezó a buscar su lugar en el mundo. Vetrano decidió regresar a la Argentina con su personaje: "Volví porque sentí que se había cumplido un ciclo. Estaba con falta de utopías, no me imaginaba más a largo plazo viviendo en Bélgica. Todo lo que quería alcanzar, se estaba dando. Me faltaba un nuevo desafío. Era una sensación interna que tenía, como si un ciclo en mi vida se hubiese cerrado. Me faltaba tener sueños por los que luchar y me estaba empezando a apagar".
Vetrano se dio a conocer en Timbre 4 con su espectáculo Fuera!, y ahora, en su segunda temporada, se presenta en una nueva sala, donde se cuelan a veces niños: "Pensé la obra siempre para la risa del adulto, pero en el último tiempo empecé a descubrir que los chicos también se ríen, claro, que es otro tipo de risa, de aquello que entienden, pero hay cosas en mi propuesta que resultan efectivas".
Pelirroja, aniñada, seductora y pícara, Vetrano define a su personaje: "María Peligro es una bomba de tiempo, una mujer que vive al borde de un abismo emocional enorme y que se encuentra bastante sola. Decide romper con las normas que le impusieron y escaparse de su destino. Ella elige la liberación", cuenta. Fuera! es el espectáculo donde aparece María Peligro el día de una celebración: "El título alude a salir de los mandatos familiares, del lugar donde otros te ubican, ese mismo lugar donde vos no querés estar", explica.
El espíritu trashumante de Vetrano sigue intacto. "El mundo del circo, dentro de las artes escénicas, es el más autónomo, el más gitano de todos. Quiero eso para mi vida. Si bien entiendo y estoy de acuerdo con las reglas del teatro, a mí me identifica el circo." Por estos días, Vetrano ensaya un espectáculo para un espacio no convencional (un escenario no contenido en una sala teatral) y el año próximo regresaría al circo. "La calle me enseñó a ser efectiva, no te deja dudar, donde pongo el ojo, ¡pum! Esa potencia, llevada al teatro, es genial. La calle permite que te hagas gigante, efectivo y visual", resume una de las artistas más personales y desopilantes que haya aparecido en el último tiempo en los escenarios porteños.
Fuera!
Unipersonal de Leticia Vetrano
Teatro Beckett, Guardia Vieja 3556.
Jueves, a las 22.