Un auditorio inclusivo para las vacaciones
La programación infantil del Cendas ya es un clásico para los vecinos de uno de los barrios más grandes de Buenos Aires
"Como crisis es oportunidad, todos los miedos e inseguridades que tuve este año para sostener este espacio los convertí en el eje de la programación para los chicos: cómo superar el temor que nos provoca lo distinto y disfrutar de la magia de conocer a otros que no son como yo", dice Mariela Pruss, la directora y fundadora de Cendas, un teatro y centro cultural en Palermo, abierto todo el año, pero que en vacaciones de invierno se consolida como un clásico que ofrece, a todo vapor, espectáculos infantiles. Esta vez, además, con la particularidad de poner el acento en la experiencia inclusiva para compartir en familia diferentes voces.
La sala, totalmente equipada y con lugar para 125 espectadores, se inauguró en 1997 al reciclarse un viejo teatro abandonado. Fue allí donde dieron sus primeros pasos el Proyecto Upa, compañía de teatro para bebés, y los populares Cazurros, hace unos quince años. Poco a poco, a pulmón y sin subsidios, el auditorio se ganó un lugar en el barrio y alrededores gracias a los espectáculos infantiles. Las familias que no quieren trasladarse hasta la calle Corrientes ni les interesan las megaproducciones encontraron en Cendas una opción de calidad cercana para las vacaciones de invierno. Solo por esas dos semanas, el espacio ofrece espectáculos infantiles que ya son un clásico del boca en boca.
Siempre con la temática de superar diferencias, desde hoy hasta el domingo podrá verse un amplio abanico de propuestas. Hoy, a las 16, el animador, clown, titiritero y cantante Horacio Beker, mejor conocido como Rulito, presenta Jugando en la ciudad: una propuesta participativa para que los más chiquitos aprendan a cuidar el medio ambiente.
Mañana y el sábado, a las 16, para niños de uno a seis años, Nati Musical sube al escenario con sus Animales divertidos, para conocer a nuestros grandes amigos de la granja y la selva, con dirección de Natalia Presa. También el sábado, a las 17.30, para chicos del jardín de infantes, la banda Brotan Notas, integrada por músicos y docentes, presenta Cuentos que cantan, para unir historias y canciones.
El domingo, a las 16, para chicos de 4 a 10 años, Tito y Coloso en La casa embrujada, presentan su propuesta con títeres, clowns, rap y mucho humor, dirigido por Gabi Goldberg. A las 17.30, con actores y actrices con y sin discapacidades, llega Gualterio, de Ana Laura Estrin: teatro inclusivo realizado por la fundación Discar, que trabaja por la inclusión de personas con discapacidad intelectual, en colaboración con la fundación Sagai, que reúne a actores intérpretes. Soledad Avola, Agustín Alonso, Luciana Lifschitz, Mariana Marmoratto, Bautista Sena y Juan Martín Zubiri actúan en esta propuesta con música de Tian Brass, coreografía de Carla Vitantonio y escenografía realizada por alumnos del taller de Artes Visuales de Discar: para recuperar aquellos sueños que nos conducen hacia la libertad y para toda la familia a partir de los seis años.
A pesar de las dificultades (la factura de luz pasó de 800 a 12.000 pesos), Pruss redobló la apuesta con la apertura de una segunda sala: Peque Teatro, para los más chiquitos, un espacio de proximidad donde se pueda gatear, bailar y participar. Hoy es el último día para aprovechar la Peque, donde, a las 15, se abre el taller "Música y risas en movimiento", una actividad participativa con juegos sonoros, cotidiáfonos (instrumentos inventados), telas y mucho más para explorar. Para tener en cuenta: en esa sala se presentó, hace pocos días, la compañía Al Pie de la Cama, que realiza teatro en miniatura, obras de 15 minutos pensadas para hacerse junto a las camas de los hospitales de niños. Pero el apoyo oficial para llevarlo a cabo no fue renovado todavía.
Pluralidad de espectáculos infantiles
hasta el domingo 29.
Auditorio Cendas, Bulnes 1350.
Entradas, $250. Pack 4 entradas: $800. Bebés hasta 24 meses: $70.
Consultar, www.cendas.com.ar