Bailando por un sueño 2017: la Chipi abrió el rock de salón y se llevó un gran puntaje

Luego de la expulsión de Yanina Latorre, un nuevo ritmo llegó al Bailando por un sueño . Esta vez es el turno del rock de salón, uno de los movimientos más complicados del certamen que ya comenzó a poner en apuros a algunas de las parejas.

La encargada de abrir el ciclo fue Mariela "la Chipi ", que acompañada de Mauro Caiazza consiguió un puntaje que la salvó del duelo. En la devolución, Ángel De Brito felicitó a la pareja por su talento y elogió a especialmente a Mauro (7). Carolina “Pampita” Ardohain consideró que el final fue un poco accidentado, pero que sin embargo ellos tuvieron una noche perfecta (10). Moria Casán observó que a la Chipi le faltó “explotar algo”, y que el número no la mató (voto secreto), y Marcelo Polino coincidió en que la coreo no fluyó, pero que no estuvo tan mal (7).

Luego llegó el turno de Flor Bertona y Sol Pérez , que no consiguieron sorprender a los jurados. Ángel opinó que el trabajo de Sol fue muy digno, aunque no brilló como en otras galas (5). Pampita observó desprolijidad en los trucos, pero por otra parte elogió a ambos por su buena energía y por el evidente trabajo en cada uno de los números que representan (8). Moria a su vez vio a Pérez algo desactivada y cerró diciendo que le “gustó hasta ahí” (voto secreto). Por último, Polino fue lapidario y opinó que el número no le gustó nada (0).

La noche la cerraron Chechu Bonelli y su bailarín Facundo Insúa. Luego de un baile muy divertido, Ángel fue directo y dijo "no me gustó" (3). Pampita opinó que Bonelli domina mucho el baile, y expresó que la propuesta sí le cerró (6). Moría rescató el disfrute de la pareja, pero consideró que quizá la coreo fue demasiado difícil para Chechu teniendo en cuenta que no es bailarina profesional (voto secreto). Por último, Polino comentó algo similar a lo dicho por Moria, cerró la votación resaltado que el baile “fue un disgusto”, y disparó contra la coach por proponer una coreo demasiado compleja (0).