El marginal 3: un nuevo personaje queda en el medio de la guerra entre los Borges y la "Sub 21"
La llegada de Cristian "Moco" (Lorenzo "Toto" Ferro) a la cárcel, y su relación con los dos grupos que se dividen el penal, marca el eje del segundo capítulo de El marginal 3 .
Esta temporada -que argumentalmente se sitúa antes de los acontecimientos de la primera- incrementa el conflicto entre Diosito (Nicolás Furtado) y Mario Borges (Claudio Rissi) con la "sub 21". En ese polvorín que siempre parece a punto de estallar, Moco se ubica como la moneda de cambio y pieza fundamental.
Luego de un primer encuentro con el ala joven en el primer capítulo, Moco sale a la noche de San Onofrio con Diosito y Colombia (Daniel Pacheco) para hacer una "excursión", o como le dice Diosito: "ponete bien cheto, guachín, que nos vamos de joda". Un asalto a un restaurant que termina con un policía acribillado.
Mientras el Pantera (Ignacio "Nacho" Sureda) continúa peleando a la orden de los Borges, tiene una visión de El Sapo (Roly Serrano) que promete no ser la última. La otra sorpresa en esta segunda emisión es la aparición de Luna (Maite Lanata) visitando a Moco, en el inicio de una historia de amor que conectará directamente con los acontecimientos de la primera entrega.
Pero el momento más destacado (y también más violento) de este segundo capítulo es el ajuste de cuenta de Diosito y su banda a un preso de la banda rival que les robó droga del laboratorio de producción que maneja. Nuevamente Moco pasa a ser el protagonista de la acción, viéndose obligado a golpearlo, para después ser testigo de cómo le cortan tres dedos con una sierra eléctrica.
Con la violencia extrema como denominador común en cada una de las subtramas, esta nueva entrega de la saga producida por Underground promete ir a fondo, sin concesiones y a como de lugar.
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