Top Five: Héroes de acción
Tomamos el estreno de El legado de Bourne como excusa para recordar a solo cinco personajes sinónimos del género; por Milagros Amondaray
1. JOHN McCLANE
Si tuviera que elegir a un personaje de Bruce Willis que refleje su dominio de dos géneros en los que lo vimos con mayor frecuencia (la acción sí, pero sobre todo la comedia), probablemente me iría para el lado de Hudson Hawk de Michael Lehmann, gran historia concebida por el propio actor, quien desde Moonlighting a esta parte ha sabido, a fuerza de carisma y ese timming cómico mencionado previamente, sobrevivir en la industria. No hay dudas: su perdurabilidad es admirable. Pero, a pesar de cierta predilección por Eddie Hawkins y su gran dupla con Danny Aiello, me quedo con John McClane, a esta altura un ícono del género, que se destaca más allá del sidekick (léase "compañero de aventuras") de turno y que, como todo héroe que busca la inmortalidad, tiene su frase distintiva: "Yippee-ki-yay, motherfucker!".
2. JASON BOURNE
Más allá de que ahora tengamos más fresca la imagen de Bourne con el rostro de Jeremy Renner para a) hacerle justicia al personaje concebido por Ludlum y b) escalar alto en cuanto al género que nos ocupa son incuestionables. Es cierto también que Damon logra sus mejores momentos cuando lo tiene a Paul Greengrass guiándolo. Desde las tomas cerradas con esas inolvidables peleas de puño hasta los duelos más épicos, en el final de la primera trilogía el realizador va de lo micro a lo macro sudando furia. En las novelas, Ludlum describe a Bourne como un hombre que se hace paso a la fuerza, que siempre encuentra la manera de abrirse camino. ¿La clave de todo? Que Damon pudiera traducirlo. Y vaya si lo hizo.
3. HARRY CALLAHAN
No podemos ni olvidarnos de lo clásico ni, en consecuencia, olvidarnos de Clint Eastwood, uno de los más grandes directores que ha dado el cine. No es casual que su última actuación hasta la fecha haya sido en la enorme Gran Torino, donde encuentra el modo de homenajear un cine con héroes férreos, de rostros impenetrables, de un cine del cual él mismo fue un gran exponente. Y como muestra, tenemos a Callahan, a Harry El Sucio, a un vengador que parece salido de un western y que, en los gestos, en la postura y en la manera brutal de escupir su verdad, reencarnaría luego en el ya mítico Walt Kowalski.
4. FRANK MARTIN
Si fuera posible, elegiría a (casi) toda la filmografía de Jason Statham, a modo ilustrativo de cómo a partir de Juegos, trampas y dos armas humeantes hasta la secuela de Los indestructibles, le inyectó vitalidad al género. Lo renovó, lo llevó al límite y, un poco a la manera de Vin Diesel, hizo creíble lo improbable. Dentro del universo de El transportador y, especialmente, dentro del universo de Crank, el actor se hace cargo de la narrativa inverosímil y lleva adelante los protagónicos como si hubiese nacido para esto. Quizás así sea. En él la pretenciosidad está ausente y lo que siempre se pone de relieve es la intención de darle al espectador lo que el espectador quiere ver, pero nunca renunciando a su impronta.
5. XANDER CAGE
Está bien, está bien. Lo más probable es que en esta elección vayamos a disentir. La inclusión de este personaje interpretado por Vin Diesel en xXx responde a una necesidad: siempre es fundamental tener a un (anti)héroe de acción con la capacidad de reírse de sí mismo. Y quien empezó riéndose primero fue el propio actor, cuando abordó como productor este proyecto, luego se calzó ese saco de piel irrisorio, aprehendió a la femme fatale que compuso con astucia Asia Argento y enfrentó como pocos el miedo al ridículo. Para el caso, vean la escena de aquí abajo, donde Diesel juega con el papel de galán con más autoconsciencia que ingenuidad.