Un puente entre el Río de la Plata y Lisboa
A partir de hoy, el Festival Porteño de Fado y Tango reunirá a artistas de ambos géneros
"El fado y el tango tienen el mismo espíritu de bohemia y códigos similares". La cantante Karina Beorlegui define así el espíritu del Festival Porteño de Fado y Tango, que se realiza por tercera vez en Buenos Aires, con entrada libre y gratuita, y que contará con la presencia de una referente actual del género, como la portuguesa Mafalda Arnauth.
El festival, que comenzó en 2012, surgió a partir de la buena recepción que causó el ciclo Fado Tango Club en el CAFF. "Todo surgió durante una gira que hicimos con los Hermanos Gabino en Lisboa. Nos empezamos a vincular con los músicos de la noche fadista y empezaron los cruces. Ellos querían tocar tangos con la guitarra portuguesa y nosotros queríamos tocar fados. Uno de los Hermanos Gabino se compró una guitarra portuguesa. Y todo ese intercambio real en Lisboa se fue incrementando con los años".
Después de ese primer encuentro el grupo viajó cuatro veces a Portugal. "Eso me hizo pensar que estaría bueno generar un lugar de pertenencia de ida y vuelta, que reúna al tango y el fado", relata Beorlegui, una de las exponentes más sólidas de ese cruce de géneros.
Durante nueve años, el Fado Tango Club se convirtió en un refugio para la nueva escena de fadistas locales y los nuevos creadores del tango. "Como ese espacio creció cada vez más y no alcanzaban algunas fechas por año, nació la idea de un festival. Empezamos a traer fadistas de Portugal y el espacio creció. Hoy es un reflejo del desarrollo de una nueva escena del fado y el tango", sostiene la cantante.
Todos los fados
En la nueva edición del Festival Porteño de Fado y Tango, que se realizará entre hoy y pasado mañana en las sedes del CAFF (Sánchez de Bustamante 772) y Teatro Monteviejo (Lavalle 3177), participarán la fadista Mafalda Arnauth, acompañada por Ramón Maschio en guitarra. Desde Chile, llegará el proyecto Fado al Sur del Mundo, y entre los locales estarán Fadeiros, Almalusa, Luz de Lágrima, Mariana Accinelli, Hernán Lucero con Orquesta y la anfitriona y creadora del festival, Karina Beorlegui. "Después del Festival Porteño de Fado y Tango aparecieron otros festivales. Nosotros igual tenemos algo diferente, que es la identificación de unir y generar un diálogo entre ambos géneros con exponentes que hicieron resurgir el género después de años de letargo. La idea es que la gente pueda hacer una especie de inmersión en las dos culturas".
A comienzos del 2000, artistas como Misia y el grupo Madredeus, y más adelante la generación encabezada por Dulce Pontes y Mariza, despertaron un interés mundial por los sonidos de Portugal. En Buenos Aires, una nueva generación se reconciliaba con el género y desarrollaba una nueva escena. Para la cantante Karina Beorlegui siempre hubo una suerte de fractal entre los dos géneros. "Amália Rodrígues era fanática de Gardel. Ambos salieron en la misma época y eso va hilvanando una historia común, que recién se está empezando a contar. Hay un romance flotando en el aire entre el tango y el fado".