Una aproximación a Houdini
Harry Houdini es el nombre artístico con el que se conoció a Erich Weiss, un inmigrante de Europa del Este de origen judío que triunfó en los Estados Unidos hasta convertirse en un destacado ilusionista, que luego alcanzó fama mundial. Houdini cambió el concepto de que los espectáculos de magia debían restringirse a sacar conejos o metros y metros de pañuelos del bolsillo de una galera. Diseñó asombrosos trucos realizados en imponentes escenografías y luego desafió a la muerte en varias oportunidades con increíbles escapes públicos que dominaba como ningún otro ser humano.
La vida de este personaje es la que aborda la miniserie en dos episodios, que ofrecerán, en simultáneo, History y A&E, mañana y pasado mañana, a las 21. El protagonista de esta producción es Adrien Brody, quien en 2002 ganó el Oscar por su papel en El pianista, de Roman Polanski. En la miniserie lo acompaña la actriz Kristen Connolly (de House of Cards), que hace de la esposa del mago, un personaje fundamental en su vida.
La producción no se limita a mostrar el lado artístico de Houdini, sino que muestra también otras facetas muy interesantes que tuvo su vida, como fueron algunos episodios en los que estuvo involucrado en casos de espionaje internacional y en una lucha personal que llevó adelante contra el espiritismo.
"Lo que más me impactó cuando estudié a este personaje para el papel fue su personalidad. Era implacable y, gracias a esa cualidad, venció tremendos fracasos y penas, ambos en sentido físico. Lo que logró siendo un inmigrante pobre de Europa del Este fue gracias a una tenacidad impresionante. Es lo que lo hace relevante hoy en día, porque no mucha gente llega tan lejos como él ha llegado en sus condiciones. Y lo que más me divirtió en el proceso de aprendizaje es haberme enterado cómo hacía sus trucos imposibles", confiesa Brody.