Los salones del automóvil tienen un encanto especial. Son la pista de lanzamiento de los nuevos modelos, se exhibe lo último del sector y se puede husmear el futuro a través de los clásicos concept car.
Quizás a causa de las tecnologías, estas exposiciones cayeron un poco en desgracia: costos altos por los stands para que las novedades se vean antes por las redes sociales. Pero esta edición del Salón de San Pablo, la 30° (¿la última?), tuvo brillo y condimentos de sobra. Brillo, por el peso de los anuncios. Condimentos, por una serie de factores que podrían enumerarse: 1) es el show automotor de más relevancia en América Latina (más desde que se conoció que no habrá Salón de Buenos Aires en 2019); 2) las expectativas por la asunción en el gobierno brasileño de Jair Bolsonaro; 3) la crisis argentina, ya que las presentaciones suelen replicar de este lado de la frontera.
El desplome que sufrió el mercado de Brasil desde 2015 no tuvo un rebote que lo devolviera a los niveles de sus años de esplendor, como cuando arañó las cuatro millones de ventas allá por 2013. Incluso, lejos de la imagen de Brasil potencia mundial que se proyectaba hace no mucho tiempo, los patentamientos llegaron a caer por debajo de los dos millones, con una capacidad instalada para producir el doble. Sin embargo, para este año se esperan 2,6 millones de ventas y un leve crecimiento en los próximos años. Hay expectativas de las automotrices en la era Bolsonaro, a quien esperan con un ciclo expansivo bajo el brazo.
El sector también se ilusiona con que el nuevo presidente encare una serie de reformas aperturistas, que tengan como horizonte acuerdos de libre comercio con Europa y otras regiones del globo. Esto implicará cambios laborales, impositivos y en infraestructura, ya que hoy Brasil sólo está en condiciones de exportar a la Argentina (y viceversa).
De ocurrir esto, tendrá impacto obligado en nuestras pampas: las industrias de ambos países son complementarias y por la magnitud de Brasil, Argentina estará ante la necesidad de adoptar políticas similares para no quedar afuera del mapa, en momentos donde los proyectos industriales locales están en alerta, salvo excepciones.
Parte de este optimismo se trasladó a la exposición paulista, donde se presentaron nuevos modelos, en especial pick ups y SUVs, pero donde se vio el mayor impulso a la llegada de autos eléctricos a la región desde que esta tecnología está disponible en el mundo.
Enchufes
Los autos ecológicos surgieron hace una década, aproximadamente, y ahora tuvo punto de largada para la región. Si usted estaba esperando la llegada a los concesionarios de los vehículos de cero emisiones, vaya reforzando las instalaciones eléctricas de su casa, porque es inminente la posibilidad de comprar un coche con propulsión alternativa.
Ahora, en un mes, en enero de 2019 Nissan lanzará la preventa del Leaf, el eléctrico más vendido del mundo. La estrategia es regional, y también tiene luz verde para Chile, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Puerto Rico y Uruguay. El Leaf cuenta con una autonomía de hasta 389 km en el ciclo urbano de acuerdo con WLTP (270 km en el ciclo combinado) y 240 km de acuerdo al ciclo EPA. Entrega 110 kW (149 caballos de fuerza) y 320 Nm de torque.
Así, será el segundo modelo eléctrico en venderse en el país, tras el arribo este año de la Kangoo ZE de Renault, aunque sólo viene en versiones furgón y con venta exclusiva para empresas. La marca del rombo también avanzó en la electrificación de la gama, y en San Pablo anunció que comenzará a comercializar el ZOE, un urbano 100% eléctrico, al público general. Todavía no está confirmado su arribo a nuestro país, pero su lanzamiento brasileño le abre mejores posibilidades.
Por último, se develó al Chevrolet Bolt EV, un auto que General Motors concibió como su primer modelo popular eléctrico y que tiene éxito en Estados Unidos. Será lanzado en 2019 en Brasil y en 2020 en Argentina. Tiene motor de 200 CV y una autonomía de 383 km. Para cargar la batería se pueden usar toma hogareña y demora 10 horas en completar el proceso. Con la recarga rápida, demora dos horas.
Además, en términos de motores convencionales, Chevrolet mostró al nuevo Camaro de 461 CV y un concept del Cruze fabricado en Rosario, con 300 CV y look pistero.
En alza
Las otras estrellas del Salón de San Pablo fueron las pick ups, que están de parabienes en especial en el mercado argentino. Además del buen momento de los sectores que demandan camionetas, se pusieron de moda incluso para el uso urbano. Esto llevó a las marcas a desdoblar un segmento que hasta entonces estaba unificado en las medianas.
Así, Volkswagen develó a la Tarok. Se trata de una pick up intermedia para competir con Fiat Toro, una categoría donde Volkswagen no tiene participación. Desarrollada en la región se ubicará por debajo de Amarok y por encima de Saveiro, y aún está en estado de concept. Entre sus rasgos innovadores, los asientos de la segunda fila se pueden rebatir para ganar volumen de carga en la caja. Además, llevó al T-Cross, el SUV compacto que tuvo su debut mundial en octubre. Es la gran apuesta de la marca alemana para ganar volumen en el segmento B con un producto para competir con Ford EcoSport, Honda H-RV, etcétera.
De fabricación brasileña, llegará al país en 2019 con motor 1.6, el mismo que equipa al dúo Polo-Virtus, aunque se esperan otras alternativas, como un propulsor turbo 1.0.
En San Pablo, la figura del stand de Ford fue Territory, un SUV que la marca del óvalo desarrolló de la mano del aliado chino JMC. Se venderá en principio sólo en el Gigante Asiático. Es más grande que Kuga y en el autoshow fue testeado para ver la recepción del público de cara a su probable llegada a la región.
También mostró dos ediciones especiales de la pick up Ranger fabricada en Argentina: la Black Edition, que arribó a los puntos de venta con una estética negra casi idéntica al concept; y la Storm, de look off road, sin planes de llegar a producción.
Ford también mostró a la EcoSport Storm, otro lanzamiento previsto para Argentina. Se basa en las versiones full Titanium 4x4 y agrega detalles estético que le dan aspecto todoterreno.
Por su parte, Toyota develó una nueva edición limitada de la pick up Hilux (también nacional y cómoda líder de su segmento), que llegará al mercado este mes. Serán 500 unidades de la nueva Gazoo Racing, que tiene un trabajo más radical principalmente en las suspensiones y una estética más deportiva.
Bajo el sello Gazoo Racing también mostró una adaptación del nuevo Yaris, en su versión hatch, además de varios modelos de competición.
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