No encuentro ni la tijera ni la pinza de depilar. Me enferma perder cosas porque detesto buscar. No nací para buscar nada. Lo que dejé ahí y no está, fue. Doy una vuelta, levanto papeles, reviso carteras y listo. No puedo más, no me da la paciencia para buscar nada. Pero sé que esta por acá y no me relajo. Qué broncaaaaaa! Estoy convencida de que existe un universo paralelo donde viven nuestros objetos perdidos, algunos dicen que te esconden las cosas "los duendes". Lo que sea, me pone los nervios de punta.
LA NACIONConforme a los criterios de
Más información