Consultorio beauty: todo lo que querés saber sobre tu piel

Nos llegaron cientos de dudas. Obviamente ninguna es un problema existencial, pero todas válidas y muchas muy repetidas. Así que salimos a consultar a algunos de los mejores expertos y referentes en las distintas temáticas y recopilamos en esta nota muchas de las respuestas para encarar el verano con toda la info en tendencias, tratamientos y novedades del mundo beauty. Arrancamos con piel. Estas son algunas de las dudas que surgieron y un experto nos ayudó a encontrar la respuesta.

Ojo, estar bronceada ya no es un signo de piel saludable. Al fin y al cabo, se trata de una reacción de la piel ante la agresión de los rayos UV que emite el sol, que son la principal causa de cáncer de piel. Pero podés lograr un bronceado responsable y duradero usando protectores solares con FPS 30 o más y tomando sol solamente en horarios adecuados (evitar el sol directo de 10 a 16) e hidratando tu piel todos los días. ¿Un secreto para ayudar a que el colorcito dure más? Agregá alimentos con mucha cantidad de betacarotenos en tu dieta, como zanahoria, zapallo, acelga, mango, papaya.

Existen protectores solares para pieles grasas. En general, tenés que fijarte cuando lo compres que diga "oil free" o "libre de aceites". Además, siempre privilegiá los que vengan con textura de gel, que suelen ser más matificantes. Los mismos protectores son buenos para pieles con acné.

Si tenés rosácea, más que nadie deberías usar pantalla solar todos los días del año y a toda hora, ya que los rayos UV emitidos por el sol reactivan la rosácea y la hacen más visible. Existen marcas comerciales que tienen componentes específicos para esta patología. Generalmente, sirven los que dicen "para pieles sensibles" o, idealmente, los que afirman que reducen el enrojecimiento de la piel.

Las mascarillas faciales son productos cosméticos que sirven como booster para ayudar a tratar diferentes condiciones de la piel. Las que están de moda ahora son las sheet masks, hechas con fibras naturales y con algún activo específico para lo que se quiera tratar. Lo mejor de estas máscaras es que se pueden aplicar en casa, dejándolas 15 minutos sobre el rostro. Aunque también podés averiguar por tratamientos similares que se hacen en un consultorio dermatológico. Las hay de todo tipo: hidratantes, purificantes, suavizantes... Preguntale a tu dermatólogo cuál es la mejor para vos.

Una regla básica es aplicar los productos de menor a mayor densidad, esto se explica porque si aplicás los productos más densos (pesados) primero, estos actúan como barrera y disminuyen el paso de los más livianos. Por lo tanto, el orden ideal de aplicación sería: primero el serum, después las cremas en general (hidratante, contorno de ojos, etc.) y, por último, la pantalla solar.

Primero la base, siempre. Con ella se tapan algunas imperfecciones y se atenúan las ojeras. Recién ahí vemos si hace falta sumar corrector. A veces no es necesario.

Tenés que tener en cuenta tu tipo y tu tono de piel. Si tenés piel oleosa, fijate que la base sea matificante o libre de aceites. En cuanto al tono, elegí siempre el más parecido a tu color natural y salí a comprobarlo a la luz del sol (y en la cara, no en la mano).

Si se te corre, en general, es porque tenés oleosidad en los párpados. Para solucionarlo, ponete una minigotita de base, luego una sombra o polvito mate y arriba el delineador. Tratá de que este último sea a prueba de agua, que no suele correrse.

Son productos que preparan la piel para recibir el maquillaje. Así, la piel lo absorbe y no absorbe la base. No siempre son necesarios, pueden reemplazarse por serums livianos, cremas humectantes o matificantes, según el efecto buscado.

Experto consultado: Diego Rodrigo Silva. Dermatólogo, trabaja en estética y dermatología en el Sanatorio Finochietto. www.sanatoriofinochietto.com.

Maquilló y peinó Nati Rayo para Rayo Maquillaje Profesional. Agradecemos a Marina Etcheto por su colaboración en esta nota.