Dad Bod o la moda de la pancita indulgente... sólo con los hombres
La contracara del cuerpo trabajado es el abdomen rellenito, aunque sólo lo celebran ellos
Lejos del ideal de belleza esquelética propuesto durante décadas de modelos corporales (femeninos, pero también masculinos) semianoréxicos, se encuentra el indulgente, accesible y fácil de mantener Dad Bod –o cuerpo de papá, aunque en castellano haya adoptado traducciones espantosas como "fofisano"–. Pero ¿cómo se define un Dad Bod?
En palabras de Mackenzie Pearson, estudiante de la norteamericana Universidad Clemson que con su artículo "Why Girls Love The Dad Bod", publicado en el siteThe Odissey, viralizó el término, el Dad Bod se autodefine a través del siguiente manifiesto: "Voy de vez en cuando al gimnasio, pero bebo fuerte durante el fin de semana y disfruto de comer ocho porciones de pizza en una comida". Según Pearson, Dad Bod se encuentra en algún punto (no necesariamente equidistante) entre un hombre con sobrepeso y otro que luce abdominales perfectamente marcados.
Es a través de la imagen actual de celebridades como Leonardo DiCaprio, Ben Affleck, Russel Crowe, Alec Baldwin o Seth Rogen que Pearson y los numerosos partidarios del Dad Bod reivindican el valor de una incipiente pancita de cerveza, de unos ligeros flotadores y, en definitiva, de un cuerpo real que no duda en mostrarse descontracturado.
"Aunque a todos nos gusta un cuerpo escultural, hay algo acerca del Dad Bod que hace que los chicos parezcan más humanos, naturales y atractivos", escribió Pearson en The Odissey, y enumeró algunas de las razones de ese atractivo: "No nos intimidan; no queremos muchachos que nos hagan sentir inseguras con nuestro cuerpo"; "Nos gusta [a las mujeres] ser la linda de la pareja" son algunas de las razones señaladas por la estudiante.
Argumentos sexistas
Pero la argumentación en defensa del Dad Bod no fue bienvenida por todos ni todas. "En su artículo, Pearson pierde la oportunidad de cuestionar el estereotipo social de que sólo los dioses altos, soñados y de playa son físicamente atractivos –escribió Allison Underhill, también estudiante universitaria, en The Huffington Post–. Podría haber alentado a los hombres a defender sus cuerpos naturales. Pero en vez de eso, ella hace foco en las mujeres. Person afirma que el Dad Bod es sólo una excusa para que la mujer se sienta la más atractiva en una relación. Eso no sólo es erróneo y egoísta, es sorprendentemente sexista".
Para Brian Moylan, redactor de la revista Time, el estereotipo del Dad Bod "continúa reforzando la desigualdad entre lo que es aceptable para el hombre y lo que es aceptable para la mujer", según escribió en su artículo "Dad Bod is a sexist atrocity".
"Mientras las mujeres tienen que ir a pilates y controlar cada una de las calorías, los varones son libres para dejarse estar, comer todo lo que quieran, y aun así pueden esperar que sus futuras parejas estén en forma", continuó Moylan.
Es que para el periodista el verdadero conflicto no está en el valor intrínseco de este modelo de cuerpo masculino. Según dice, "el problema de el Dad Bod no es lo que dice sobre los hombres, sino lo que dice acerca de las mujeres y de cómo nosotros las tratamos".
LA NACION