Diseño. Son pareja y crearon un mercado online que promueve la economía circular
13 de agosto de 2020
Josefina Molinari (38) y Enrique Ferrando (39) son los socios fundadores de Greenbox, un marketplace online de productos de diseño que busca transformar cómo consumimos y minimizar nuestro impacto en el medio ambiente. Te contamos la historia de su emprendimiento.
Ella tiene estudios en Diseño de Interiores y más de quince años de experiencia en moda. Él es creativo y emprendedor. Oriundos del Interior y pareja hace nueve años, viven en Bragado, a 210 km de Buenos Aires, donde cultivan su amor por la naturaleza y un estilo de vida sencillo y natural junto a sus dos hijos.
Era el verano de 2016 cuando le dieron forma a la idea de emprender: "Teníamos muchas ganas de hacer un proyecto juntos", relata Josefina. "Yo quería hacer algo que tuviese un impacto ambiental; Enrique, algo que tuviese un formato digital; y que vivir en el interior no fuese un impedimento para el desarrollo y escalabilidad del proyecto". Así fue cómo surgió Greenbox, un mercado online con foco en el consumo responsable, cuyos productos provienen de "emprendedores y tiendas que priorizan el diseño atemporal, los materiales naturales, el comercio justo y el respeto por los trabajadores y los recursos naturales". Un espacio donde la sustentabilidad juega un rol clave y donde el consumidor consciente puede encontrar todo lo que necesita.
Consciente y sustentable
Bajo la premisa "Verde es el nuevo negro", los socios incentivan una economía de tipo circular, según la cual cada objeto o prenda puede repararse, reutilizarse y reciclarse para minimizar la huella ambiental. "Crecimos en una década donde comprar, usar y tirar era moneda corriente; nadie se planteaba de dónde venían o a dónde iban las cosas", explica José. Cuentan con alrededor de 200 marcas de diseño que ofrecen productos de lifestyle, deco e indumentaria nueva y usada para hombres, mujeres y niños. Pero además, es un espacio donde uno puede publicar y vender productos que ya no necesita. A la fecha, la línea más vendida es la Zerowaste (cero desperdicio), que propone reemplazar los elementos de uso cotidiano contaminantes por otros más amigables con el usuario y el medio ambiente.
Desafíos y crecimiento
El hecho de vender productos que no son de consumo masivo, sumado a un público muy específico, fueron grandes desafíos que Josefina y Enrique tuvieron que enfrentar en los comienzos de su proyecto. En el camino aprendieron a ser auténticos sin perder flexibilidad y a estar siempre dispuestos a cambiar, pero sin perder de vista sus valores y filosofía. La mayor dificultad, reconocen, es necesitar a veces una desconexión absoluta y no poder lograrlo. "Desde el inicio fuimos muy conscientes de que no iba a ser una jugada fácil, que íbamos a tener que darlo todo y más, y que ese darlo todo no tiene fin, porque Greenbox somos nosotros, es una extensión de nuestro estilo de vida, y no simplemente un trabajo", explican. Se enorgullecen de la amplitud de su emprendimiento, del ida y vuelta que se genera en la comunidad. Emprendedores, usuarios y colaboradores comprenden una sinergia de conocimiento e inspiración que invita a volver a lo simple, a conectarse con la naturaleza y aprender de ella.
Este año se lanzaron a desarrollar una pequeña cápsula propia de productos de triple impacto, es decir, que aportan valor económico, social y ambiental. "Son productos de diseño atemporal, hechos con materiales nobles y fibras naturales, con producción local y a baja escala de la mano de artesanos, tejedoras, modistas y cooperativas de trabajo. Así fomentamos las economías locales y regionales tratando de tener el menor impacto ambiental posible", describen. Por cada prenda vendida se comprometen a plantar un árbol como parte del programa de restauración ecológica de ReforestArg.
Consejos
- "Ser auténtico y un apasionado del proyecto. Es imposible emprender algo si no podés darle todo, y para eso es necesario ser realista. Hay que tener claro por qué es necesario que ese emprendimiento o proyecto exista, y poder transmitirlo."
- "Saber escuchar. Ser extremadamente observador."
- "Nunca rendirse, sí reinventarse. Todos tenemos la capacidad de emprender, pero no todos tenemos la resiliencia que se necesita para sobrevivir en ese mundo. No va a ser fácil, pero por eso hay que amar y creer en el proyecto."
- "Y aún haciendo todo esto, el éxito no está asegurado, es un largo camino a recorrer, pero vale la pena: No hay mayor fracaso que no haberlo intentado".
En números
u$s 10.000 fue la inversión inicial
200 marcas trabajan con Greenbox
2.300 productos vendidos en los últimos seis meses
50% fue el crecimiento anual
23.4 mil seguidores en Instagram @greenbox.ar
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