Las imágenes que surgen de la resonancia magnética llaman la atención por los colores: la masa blanca ocupa casi todo el cerebro, mientras en la última foto se ve retraída. Se trata de un caso de leucoencefalopatía, una modificación a causa de enfermedad de la sustancia blanca del cerebro, producida por el consumo de cocaína.
El estudio fue publicado por el portal de investigaciones médicas BMJ Case Reports para alertar sobre los riesgos de esta adicción, a través de lo que le ocurrió a un paciente de 45 años que consumía la droga regularmente.
El hombre llegó con confusión y un comportamiento inusual a la guardia, donde fue revisado. Los médicos descubrieron que no podía realizar tareas simples o seguir comandas básicas. Así fue que decidieron investigar posibles infecciones en su sistema nervioso. Según sus padres, que lo habían llevado al hospital, había consumido cocaína dos o tres días antes.
Una resonancia magnética de su cerebro mostró variaciones y su estado siguió empeorando. Se volvió catatónico, con movimientos extraños y un tono de voz alto, lo que hizo que lo internaran en terapia intensiva.
Decidieron tratarlo por una leucoencefalopatía inflamatoria, una enfermedad de la materia blanca del cerebro que puede causar discapacidad ya que afecta los nervios que conectan las diferentes partes del cerebro entre sí y con la médula espinal.
Con un pronóstico poco alentador, ya que suele progresar rápidamente según explicaron los médicos terminando en la muerte, logró salir de terapia intensiva en dos semanas y mostrar mejoras. Pasó a un centro de rehabilitación y al año ya dio resultados normales a los análisis neurológicos.