Esta temporada, el color es protagonista
Se dice que la naturaleza es sabia. Y es cierto. Uno de los tantos ejemplos se observa en la forma de combinar los colores. ¿Quién alguna vez no quedó hipnotizado al mirar el rosado cielo contrastando con el naranja del sol? O se detuvo un segundo para admirar una vieja pared, adornada por una fucsia santarrita. ¿Y los redondos frutos del aromático azahar? Entonces, ¿por qué no imitarla? En especial con esas composiciones que nunca nos animaríamos a utilizar. Se sugiere probar con la gama del rojo: por ejemplo, el naranja con el fucsia. Dos tonos que este año sedujeron a todas las colecciones europeas.
Una paleta de sensaciones
Se dice que los colores producen sensaciones y estados de ánimo. De lo que no hay duda es de que, respecto de cómo se los aplique, pueden favorecer, destacar o disimular defectos en objetos, paredes y muebles. Eso sí, mal utilizados anulan cualquier cualidad.
Entonces... ¿Por qué merecen especial atención el naranja y el fucsia? El primero está dentro del grupo de los colores secundarios (es la mezcla del amarillo y el rojo). Se dice que algunos de sus beneficios son brindar energía, optimismo, equilibrio y seguridad. Además, es el color de la comunicación, ya que fomenta la sociabilidad.
Por su parte, el fucsia mantiene lejos las personalidades molestas, avasallantes y potencia la creatividad.
Para la arquitecta Rosi Espina son muy especiales porque generan alegría: "Están cargados de energía, presencia y mucha personalidad. No son pasteles ni complementarios. Realmente hay que estar muy decidido para combinarlos. Además, con ellos se logran efectos y climas para charlar..."
Por su parte, la arquitecta Ana León dice: "Se está usando mucho esa combinación, pero no hay que abusar. No se debe sobrecargar ni mezclar con otros colores estridentes". Y agrega que tienen la desventaja de no tratarse de una combinación clásica. Por lo tanto cuando pasa de moda requiere un cambio. "Además, después de un tiempo puede cansar y aburrir."
La arquitecta Mariana Risoleo Deniard repara en otro punto: "El naranja es cálido y el fucsia, un rosa chocante. Esta combinación puede ser peligrosa si no la usamos con cuidado."
Cómo empezar
Antes de comenzar a utilizarlos, las profesionales brindan algunos consejos para no equivocarse y embellecer los hogares. Rosi Espina explica: "Hay que saber que estamos trabajando con dos colores que tienen similar intensidad de luz". Según la arquitecta, cuando son dos complementarios como el rojo y verde, amarillo y violeta, o azul y naranja, es más fácil: se sabe que la intensidad de uno ayuda respecto de la del otro. Pero en este caso es distinto. "Por eso, desde mis conocimientos de dibujo y pintura, lo primero es experimentar en una hoja", sugiere.
León opina lo mismo: "Hacer varias pruebas de color antes de lanzarse". Por su parte, la decoradora Mariana Pereyra Iraola aconseja intentar la combinación sobre un objeto pequeño.
Y ahora sí: lo único que falta es animarse. ¿Por dónde empezar? Fácil, para eso están las especialistas. Cada una con su estilo.
- Mariana Risoleo Deniard: "Como punto de partida es posible inspirarse en un arreglo de flores secas naranja. Para crear una agradable atmósfera, las paredes pueden estar pintadas en el mismo color, pero en un tono más cálido. Como protagonista, un sofá almíbar adornado con varios almohadones en sedas orientales fucsia, ocre y amarillo. Al costado un puf fucsia de cuero. Las ventanas cubiertas por géneros trabajados con rojo claro, siena tostado y fucsia, con abrazaderas de cuero tostadas. Sobre el piso, una carpeta con los colores de la gama. La luz va a ser la que termine de unir la idea: volverla más teatral en algún momento del día. Los objetos serán el toque final. Conviene elegirlos una vez resuelto el resto. Sin apuros. Es bueno revolver las cajas de recuerdos".
- Ana León: "Estos colores van con un estilo contemporáneo, de líneas modernas y netas. Quedan muy bien con muebles que evocan la década del 60. Otra opción es el estilo mexicano, en enseres de madera, tapices y acolchados.
"Una idea para el dormitorio es, sobre una colcha fucsia y naranja, almohadones anaranjados y algún objeto decorativo dentro de la gama. Puede combinarse con alfombras en lacre. Para el baño, pisos cerámicos o de cemento en naranja. Pared pintada en el mismo tono, pero hasta 1 m de altura. Termina con una guarda fucsia y naranja. El detalle: el marco del espejo en esos tintes".
- Mariana Pereyra Iraola: "Si el toilette es de una casa antigua, con el techo alto, puede pintarlo en naranja. De esa manera le dará más calidez y luminosidad. Para alegrar la cocina es posible dibujar una guarda divisoria del techo o en la mi tad de la pared, con naranjas y frambuesas".
- Rosi Espina: "Estos colores dan una buena posibilidad de cambio en exteriores, según la luz del día o el tipo de iluminación artificial. En el estar, por ejemplo, puede haber un muro anaranjado que contraste con un sillón fucsia, o un cuadro naranja sobre una pared fucsia.
"Hay varios diseñadores de géneros que se han animado a esta mezcla con rayas, lunares y dibujos geométricos. Esto también es interesante en cortinas o, por qué no, dibujos en las paredes.
"Es recomendable pedir asesoramiento, ya que hay personas que pueden ayudarlos a pensar, vivir y hasta soñar en colores. Lo importante es que todos puedan jugar con la vida y alegría que estos tonos, como tantos otros, nos dan".
Modelos y precios
- Almohadones: con relleno soft, $ 40 (C. Suárez).
- Paño de cortina: con tiritas, en organza, $ 63,80. Camino de gasa de algodón fucsia, 23. Individual de gros en naranja, 5,95 (Galler).
- Lámparas psicodélicas: de PVC, $ 50. Manteles rayados en fucsia y naranja, 45. Puf cilíndricos y cubos, de cuerina, 60 (Quitapesares).
- Piezas de cerámica: en fucsia, bol $ 95. Salseras o dulceras, 6. Farol, en fucsia, 260 (C. Balou).
- Kilims marroquíes: de pueblos nómadas del desierto, desde $ 250. Lámparas teñidas, desde 20. Armario chino antiguo, 1590 (Desde Asia).
- Chupetes: para el vidrio, desde $ 4 (Babel).
FUENTES CONSULTADAS: Cristina Suárez: Arenales 1676; telefax 4812-6215. Prestigio Pinturerías: Avda. Callao 1500; 4801-9559. Galler: Soler 4829; 4774-3478. Quitapesares: Avda. Jorge Newbery 3713; telefax: 4551-7815. Cat Balou: Costa Rica 4522; 4833-1035. Babel: Serrano 1542; 4831-5229. Mariana Risoleo Deniard: Ciudad de la Paz 1921, 4°; 4788-0104. Ana León, arquitecta: 4301-1333-1925. M. Pereyra Iraola: 4793-8531. Rosi Espina: (15) 5011-7796. Lelé de Troya, restaurante: Costa Rica 4901; 4832-2726.