Eugenia Suárez: "Siempre que sufrí, me separé"

Hace poco, twitteó (para sus más de ¡780 mil! seguidores) que 2012 había sido "un año de aprendizaje y difícil para todos". Para ella, por lo menos, fue intenso: se separó (de Nacho Viale), se enamoró de nuevo (de Nicolás Cabré), despidió a su papá y quedó embarazada. Mientras interpreta a la hija mayor de Adrián Suar en Solamente vos, la "China" Suárez empieza a sentir cómo está creciendo su bebé en ella. La pancita tarda en aparecer y se disimula debajo de sus leggings rojo metalizado. Ella quiere ir de a poco; todavía no tiene ganas de definir cómo se va llamar su hijo/a y nos cuenta que –pasado el primer trimestre– ya no tiene sueño ¡ni hambre! Pero nos cita a la mañana en un bar y pide... ¡una pizza de queso! Está divina. Tiene mucha onda y una belleza capaz de intimidar a cualquier mujer que se le siente al lado (a nosotras, sin ir más lejos). Pero durante la charla, ella consigue, a fuerza de espontaneidad y simpatía, dejar en un segundo plano el dato de que se trata de una de esas chicas que son "exageradamente lindas" y convence de que, además, es una mujer que sabe muy bien lo que quiere.

¿Qué dijo Adrián (tu papá en la ficción de Solamente vos) cuando le contaste del embarazo? Se lo tomó con mucha tranquilidad. Me dijo: "Me viene bárbaro para la historia", aunque no sé hasta cuándo voy a estar...

¿Pensás que vas a necesitar bajar un cambio antes del parto? Puede ser. Quizá vaya menos, porque son muchas horas y está buenísimo, pero ir y venir, hacer exteriores, bajar, subir, te agota un poco.

Y tus amigas de tu edad, ¿cómo tomaron la noticia? ¡Están chochas y quieren que nazca YA! Del grupo, soy la primera embarazada, y ellas no se dan cuenta todavía de que es un bebé. El otro día, nos juntamos a comer y me decían: "Ay, qué divertido, cuando esté el bebé, lo vamos a tener todas en upa"... Yo les digo que es un bebé, que no es solo un divertimento.

¿Se te cruzaba por la cabeza la idea de que a los 21 ya ibas a ser mamá? Siempre; desde que era chica, me preguntaban qué quería ser y yo decía: "Mamá"... Quiero perros y bebés. Yo me quería casar a los 18 y tener hijos a los 20, 21. En la época de mi mamá, era normal tener hijos a esta edad; después la mujer quiso estudiar, terminar su carrera, trabajar. Pero yo quiero mi familia con mis hijos, perros, marido. Bueno, marido no, novio...

¿No te vas a casar? Por ahora no me interesa. Me da cosa entrar a la iglesia, vestir de blanco...

¿Sos católica practicante? Soy católica, pero lo único religioso que hago, desde chica, es rezar, ¡todas las noches! Ya casi nadie lo hace; a Nico le parece rarísimo. Pero para mí es lo más normal del mundo y me encanta. Cuando rezo, hago un repaso de todo el día. Agradezco mucho, pido perdón, reviso. Veo si me contestaron mal durante el día, qué fue lo que pasó...

En Twitter te definís como una chica con un carácter de mierda, ¿vos también contestás mal? Sí.

Por eso pedís perdón cuando rezás... Sí; mi familia y mis amigas se ríen, porque soy medio "cara de perro". Generalmente, soy positiva, pero si me agarrás en un día negativo, no puedo ver nada, no puedo encontrar lo bueno, no hay caso. No soy de enojarme, pero sí de contestar mal.

Si no te enojás, ¿cómo sacás lo que te da bronca? La neutralizo haciendo cosas. Me sobra energía, soy muy inquieta. Igual, me gusta estar mucho en mi casa, ¿eh? Invito amigas y estamos todo el día comiendo, viendo tele...

¿Cómo hacés para sostener la rutina con amigas de 20 cuando tu vida no tiene mucho que ver con la de ellas? Somos distintas, porque tenemos vidas distintas. Yo tengo 20 y la inocencia de una chica de 20. Muchos se confunden, porque esperan algo de mí, y yo reacciono como una chica de 20. Y bueno, sí, ¡soy pendeja! Estoy rodeada de gente más grande en mi trabajo y siempre tuve novios más grandes, pero cuando estoy con mis amigas, tengo 20.

Es que, además de tu trabajo, tenés intereses de una mujer más grande: como esto de formar una familia ya. Sí, eso es muy claro, desde muy chica, nunca dudé. Justamente, creo que por eso lo consigo. Yo no veo nada imposible, cada cosa que me imagino, la pienso como algo posible y, en general, todo lo que quiero se me da...

¿Cómo tenés tan claro lo que querés? Soy cero estratega. Me relajo y sé que en algún momento va a llegar... A veces, anoto lo que quiero en un papel, o me voy a dormir y lo pienso. Cuando era chica, quería actuar con Cris Morena y luego quise estar en Pol-Ka, ¡y me llamaron! Hace poco, encontré una agenda de cuando tenía 8 años, y el 14 de febrero decía: "Feliz Día de los Enamorados" y había pegada una foto de Nico...

¡Eso es increíble! No me acordaba y ni siquiera es que yo lo busqué a él. Se dio. Las cosas se me van dando. Yo todo me lo imaginé, por eso soy muy agradecida.

Haberte imaginado y deseado lo que te va pasando, ¿no te quita el factor sorpresa? No, siempre me sorprendo, porque no me lo imagino imposible, pero tampoco lo veo tan cercano. Nunca me acostumbro a la vida que tengo: a los 20 años, soy sana, puedo trabajar de lo que quiero, estoy embarazada, estoy con la persona que amo... Por eso, agradezco.

¿No te enroscás pensando: "Uf, voy a ser mamá a los 20..., tal vez me estaré perdiendo algo de esta etapa"? Cuando era chica, me decían que estaba quemando etapas, pero no, porque eso era lo que yo quería. Yo me imagino como una mamá muy relajada y creo que todo se puede ir acomodando y se puede ir haciendo igual con un hijo.

El embarazo es una prueba para las parejas. Ustedes no tuvieron mucho tiempo solos antes de pasar a una etapa diferente... Con Nico, desde la primera vez que estuvimos juntos, no nos separamos. Pero sí, ahora hay un montón de cosas que no están previstas. Igual ¡Nico tiene mucha paciencia! En realidad, yo tengo mucho más carácter que él.

¡Eso que no tiene muy buena fama, Cabré! Es que no le interesa, no le gusta ni le va a gustar la prensa o mostrarse. Pero Nico es otra persona con sus amigos y su familia que lo que se ve afuera.

¿Cómo lo ves en el rol de papá? Me encanta, va a ser un papá increíble, y él muere por tener un bebé.

Tenés una abuela japonesa? Mi abuela nació en la Argentina, pero sus padres nacieron en Japón. Conoció a mi abuelo en un crucero, se casaron y tuvieron a mi mamá. Ella sí es un poco más japonesita.

¿Te llama la filosofía oriental? No, solo quiero ir a conocer Japón, porque mis primos viven todos en una isla que se llama Kochi. Tengo kimonos heredados de mi abuela, y ella me cuenta que comían sushi como nosotros ahora milanesa...

¿Vos comés sushi desde chiquitita? No, me parece horrible, lo odio, no como pescado...

Debe ser difícil administrar el éxito... Lo mejor es no creerse nada de lo que dicen. En ningún momento me lo creo. No es mala onda ni nada, porque hoy soy yo y mañana sale otra chica... Ni siquiera en Casi ángeles me la creí.

Eso en la teoría, pero en la práctica debe ser complicado no creértela cuando te dicen que sos re linda y objetivamente... ¡sos re linda! Hay gente a la que le gusta creérsela y hay gente a la que no. A mí no me gusta, no me siento cómoda; cuando salgo a la calle, me quiero poner una bolsa en la cabeza porque me da vergüenza. Soy muy tímida.

¿Te interesó ser modelo en algún momento? No, porque no tengo altura. De chica hice fotos, pero no me siento muy cómoda en el mundo del modelaje, cuando te tratan como modelo. Es una cosa que te ponen, te sacan, te tocan, y a veces no tienen el mejor trato...

Pero la moda sí te gusta... Sí, la ropa me gusta mucho. No me desespero por lo que está de moda, pero sí me interesa lo que me pongo, no voy a salir con un jogging amarillo y algo que no combina. Incluso siempre quise tener mi marca de ropa. Quiero diseñar algo normal para chicas normales, como yo.

¿Qué? Pero vos no sos una chica normal. Lo sabés, ¿no? ¡Sí! Yo tengo talle normal, no soy una anoréxica. Yo no me siento identificada con ningún maniquí ni con ningún talle de los que me pruebo.

¿Y qué ropa te gustaría hacer? A mí me gusta cómo se visten Kate Moss y las gemelas Olsen. Me gusta que nunca están elegantes, pero al mismo tiempo sí. Yo no me siento cómoda cuando tengo un vestido de alfombra roja, tipo Martín Fierro. A mí dame un jean todo roto, con una camisa...

¿Y qué otras cosas de moda consumís? Me meto en el blog de una francesa que se llama Margot, que la amo.

Para comprar, ¿sos decidida o sos compulsiva? Era compulsiva, pero ahora está todo tan caro que es una locura. Yo ni me pruebo la ropa, porque ya sé mi talle y hay cosas que sé que no me gustan.

¿Sos ordenada? Depende con qué. Con la ropa: ¡para nada! Soy un desastre. Como que no la domino; me pruebo algo y lo tiro. Tengo amigas que se prueban ropa, se la quitan, la doblan, la guardan..., yo ni loca. Pero , eso sí, con la casa soy bastante ordenada.

¿Té metés con el look de tu pareja? Sí; igual, a mí me gusta cómo se viste Nico. Pero me pregunta todo el tiempo, se va a comprar algo y manda fotos para que yo apruebe.

¿Vos hacés lo mismo? No. Pero de pronto le pregunto qué le gusta más cómo me queda.

¿Él es celoso, de los que eligen siempre lo que más te tapa? Ni ahí, a veces me pongo cosas muy cortitas, remeras con escotes o sin corpiño..., y no hay drama.

Y vos, ¿sos celosa con respecto a él? A ver, a mí Nico me da mucha seguridad. Yo lo conocí trabajando, y él a mí ni me hablaba. Es un pibe tan para adentro, y eso es lo que me encantaba: no me hablaba... ¡Y me daba más intriga! Conmigo los cancheritos no tienen chance... Pero yo sí soy celosa de las minas que por ahí me doy cuenta de que le tiran onda cuando estamos juntos, y pienso: "Dale, flaca, estoy acá al lado...". Pero también Nico suele darse cuenta, no es de esos hombres que te dicen: "Ay, nunca me di cuenta de que me tiraban onda". Estoy segura de mí misma; si el día de mañana se tiene que enamorar de otra, se va a enamorar, haga lo que yo haga. Pero estoy pendiente, no es que me relajo. Es un laburo y es de todos los días.

Sos re noviera, jamás estuviste soltera, ¿no? Un mes, dos meses como mucho. Lo que pasa es que siempre pude seguir haciendo mi vida, siempre tuve mucha libertad como para juntarme con mis amigas, ir a un bar. Así que tampoco fue que lo sentí como una presión.

También debés tener facilidad para enamorarte, porque hay muchas chicas que por más que quieran, a todos les encuentran defectos o no dan con la persona... Sí, soy enamoradiza. Pero nunca fue eso de "ay, mi Príncipe Azul", también sufrí porque me he enamorado mucho desde muy chica, y no soportaba la desilusión. Pero siempre que sufrí me separé.

¿Siempre fuiste vos la que dejabas? Hasta ahora sí. Porque yo no la remo, no me interesa, nací para disfrutar, para ser feliz. ¡Como todos, bah! Si el otro se está haciendo el pelotudo una vez, OK. Si van dos veces y no cambia, y no te presta atención y sabés que es algo que puede cambiar –no le pido que cambie su personalidad–, un día me levanto rayada y ya no lo quiero más.

Bueno, eso es una cuestión de autoestima, de seguridad. No me banco estar mal, no me banco pelear, no me banco que me traten mal. Quiero estar bien. Creo que una nace para pasarla bien. ¿Por qué vas a estar en el sufrimiento o estar con una persona que no va? Igual que el casamiento: si yo me casé y tengo hijos y estoy mal, me separo, no me importa nada el papel.

Hablando de papel: ¿le mostraste ese diario íntimo con su foto a Nico? Sí. No lo podía creer. Tenemos la hojita pegada en la heladera de casa. Es una buena historia para contarle a nuestro hijo, ¿no? ?

Maquilló Bettina Frumboli para frumboli estudio con productos Lancôme. Peinó Ale Lamensa para Frumboli estudio. Agradecemos a Florencia Cosin, al restaurante Todos contentos y al supermercado Casa China por la colaboración en esta nota. Los precios pueden tener modificaciones.