Su mamá probablemente se asustó, por la presencia de cazadores o de algún otro animal. Probablemente, también, sea madre primeriza, y por eso el miedo la hizo huir y abandonarla. Pero la pequeña osita hormiguera, de apenas días de vida, encontró en los vecinos de la localidad de Pinedo, Chaco, un escudo protector. Ellos la vieron en un camino vecinal y, ciudadosos, decidieron no tocarla, a la espera de que su mamá, tal vez, volviera a buscarla: si olfateaba el contacto con humanos podría dejarla definitivamente.
A las tres horas fueron a verla. Pero seguía sola. Así que decidieron hacerse cargo de ese ejemplar bebé. La llevaron hasta entrar en contacto con Jessica Monroig, bióloga que trabaja en el Departamento de Conservación del Parque Nacional El Impenetrable, quien luego se comunicó con sus pares de Rewilding Argentina (ex CLT).
Estos expertos llevan adelante en Corrientes el Proyecto Oso Hormiguero, donde no es común que ingresen animales huérfanos tan pequeños en esta época del año: la temporada de mayor tasa de nacimientos se da entre mayo y agosto. Este bebé tiene menos de un mes, y la llamaron Pirú (Flaca, en guaraní).
Brenda Santillán, vecina de Pinedo, fue una de las que intervino respetando la fauna autóctona, dándole a la mamá la oportunidad de volver y finalmente tomando la decisión de salvar la vida de la pequeña osa.
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