Los bálsamos labiales de las marcas de beauty coreanas generalmente vienen en packagings lindísimos y traen ingredientes como manteca de karité, aloe vera y aceites esenciales. Aunque el gran hit son las lip tints, que se aplican de tal manera que el color se concentre en el centro de los labios y se esfume hacia afuera, como si hubieras comido un helado.
Izquierda: It Shiny Shimmer base de Banila Co. Derecha: It’s Skin. Macaron lip balm - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Iluminadores
Los iluminadores aportan el toque perfecto de luz a la cara. Son imprescindibles del estilo coreano. Se aplican en zonas estratégicas del rostro, como la parte de arriba de las mejillas, el puente de la nariz y el centro del labio superior.
Sheet masks
Pore solution 3 steps super elastic sheet mask de Elizavecca - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Charlotte Cho, la directora del website de e-commerce Soko Glam, define las esencias como el corazón del skin care coreano, y las sheet masks como su alma. Son láminas de tejido o fibras naturales impregnadas en una solución cosmética que se aplican sobre la cara en forma de máscara.
Serums
Una especie de “concentrado de belleza” con cuatro propiedades súper power: alta concentración de activos, absorción inmediata, acción rápida y reparación profunda. Pero ojo, por sí solos no hidratan, son un complemento de la crema diaria y no un reemplazo.
Izquierda: Power 10 formula VC effector de It´s Skin. Derecha: Wonder Pore Whipping Foam de Etude House - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Limpiadores watery
La estética coreana propone usar un limpiador a base de agua y masajearlo suavemente por el rostro con movimientos circulares hasta que el maquillaje se desvanezca. Lleva más tiempo, pero los resultados son mejores.
Cushion blush
Cushion Blusher de Peripera - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Son rubores líquidos que vienen en formato compacto con esponja porosa como aplicador. Tienen ingredientes activos para hidratar y refrescar la piel mientras proporcionan un maquillaje natural con efecto glow. Si bien la saturación de color es bastante alta, la idea es aplicar solo un mínimo de producto.
Cushion foundations
VV Cushion de Banila Co. X Iphoria - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Como los cushion blush, son bases líquidas en packaging tipo compacto atrapado en una suerte de esponja bien porosa. Adentro, trae un aplicador en forma de almohadilla que cuando se presiona sobre la esponja absorbe la cantidad adecuada de producto. Se aplica dando pequeños golpecitos sobre el rostro para obtener una piel con efecto luminoso.
Esencias
Las esencias son otro producto clave. Suelen estar compuestas por activos potentes como extractos de plantas fermentados naturalmente. Su mayor ventaja: el formato acuoso. Los activos penetran en las capas de piel más profundas y se absorben rapidísimo. Se aplican luego de limpiar la cara y pueden tener FPS.
Izquierda: all-around safe block mild essence sun milk de Missha. Derecha: cell Renew Snail Cream de Missha - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Gel de caracol
¿Se acuerdan de la publicidad de Sprayette de la baba de caracol? Bueno, acá tenemos la evolución. Usado desde la antigüedad, los coreanos le dieron un reload en cremas que son furor. Contribuye a la firmeza de la piel y estimula la producción de colágeno.
Cremas BB y CC
All day moisture BB cream de Colos Cosmetics - Créditos: Mariana Milanesi. Producción de Lucha Ramos
Las cremas BB y CC son otros dos productos originarios de la cosmética coreana. BB es la abreviatura de beauty balm o blemish balm, que podría traducirse como “bálsamo de belleza” o “bálsamo contra imperfecciones”. CC, por su lado, es la abreviatura de color correction o “corrección del tono de color de la piel”.
Dónde conseguirlos
Korean Make Up Buenos Aires. Av. Pueyrredón 1357, local 115. www.kmupbsas.com
Maquilló Rocío Marrodan para JC Agency con productos Maybelline NY y peinó Pola Amengual para JC Agency con productos Alfaparf Milano. Agradecemos a Basilotta por su colaboración en esta nota.