No a la obesidad infantil

En febrero de este año me animé a publicar algo que escribí sobre el tema en mi cuenta de IG y lancé el hashtag #noalaobesidadinfantil. No es un hashtag mío, es una herramienta que construimos entre todos, donde podemos subir ideas y recetas para fomentar la alimentación saludable. Los adultos somos 100% responsables de cómo comen nuestros chicos y tenemos que involucrarnos en esto. Hay que animarse ir por leyes más claras en la clasificación y etiquetado de alimentos. Hay que volver a cocinar casero y con menos paquetes. Hay que sumar más frutas y verduras. Hay que desterrar las bebidas azucaradas. ¿Las golosinas también? Podemos dejarlas para momentos especiales, pero tratemos de no resolver el snack de todos los días con el paquete de galletitas. Mandémosles una banana. Aflojemos con el paquetito de puré instantáneo y pongamos a hervir unas papas. Decidamos en qué "transar" y en qué no

Un ejercicio que está bueno implementar es: si vas por la calle y tu hijo te pide algo dulce, ¿por qué no probás con una banana o unos arándanos? Además, está buenísimo que los chicos te acompañen a la verdulería para hacerlos partícipes de las compras de alimentos y que elijan lo que les despierte curiosidad.

Reemplazá los jugos comprados por los naturales. Tenés mil opciones y los chicos los aman. ¿Cómo hacerlos? Poné la o las frutas que quieras, azúcar mascabo a gusto, 1 litro de agua y hielo: todo a la licuadora. Si querés ir por más, comprate el molde para palitos de helado y freezá los jugos para un postre sano y riquísimo.

Legumbres, semillas, levadura de cerveza... Te dicen que son buenísimas, pero ¿cómo las incluís? Disfrazalas: dentro de hamburguesas, barritas de cereal, smoothies o hasta con el queso rallado.

Planificar las comidas de la semana es fundamental para poder anticiparte, conseguir lo que necesitás, adelantar y freezar comidas y asegurarte de que haya más variedad en los platos de tus hijos. Mirá nuestro menú semanal, que hicimos con las recetas de @mamasanablog.