Primeros cuidados

La primera papilla es toda una experiencia para los bebes que con cada bocado descubren un mundo nuevo de texturas y sabores. También para los padres que preparan los platos con esmero y muchos cuidados. "La cocción juega un rol fundamental –explica la doctora Meni Battaglia, asesora médica de la Asociación de Empresas de Nutrición Infantil de la Argentina–. El consumo de alimentos contaminados es un foco de infección. Si bien una de las patologías más conocidas es el Síndrome urémico hemolítico (habitualmente relacionado con las hamburguesas), la bacteria que produce esta patología está presente en un alto porcentaje de carnes y sólo es eliminada con una cocción adecuada. Otro punto importante es la contaminación cruzada al momento de preparar los alimentos y tener cuidado con las tablas, cuchillos, tenedores y demás utensilios, ya que pueden ser un foco de contaminación." La asociación destaca 10 reglas sobre la alimentación de los niños:

1. Lactancia materna.

Se recomienda iniciarla en la primera hora de vida, mantenerla como única alimentación durante seis meses y seguir hasta los dos años o más, complementada con otros alimentos.

2. Cocinar bien los alimentos.

Porque muchos alimentos crudos, como el pollo y la carne, pueden estar contaminados por agentes patógenos.

3. Consumir inmediatamente los alimentos cocidos.

Cuanto más se espera antes de consumirlos, mayor es el riesgo de contaminación porque los microbios empiezan a proliferar a temperatura ambiente.

4. Guardar cuidadosamente los alimentos cocidos.

En el caso de alimentos para lactantes, lo mejor es no guardarlos. Como la parte central del alimento sigue caliente demasiado tiempo, los microbios pueden proliferar y alcanzar rápidamente una concentración susceptible de causar enfermedades.

5. Recalentar bien los alimentos cocidos.

Todas las partes del alimento deben alcanzar al menos una temperatura de 70°C.

6. Evitar el contacto

entre alimentos crudos y cocidos.

7. Lavarse bien las manos.

Antes de preparar los alimentos y después de cualquier interrupción.

8. Mantener limpias todas las superficies de la cocina.

Cualquier desperdicio, migaja o mancha puede ser reservorio de gérmenes.

9. Mantener

los alimentos fuera del alcance de insectos, roedores y otros animales.

10. Utilizar agua potable.

Más información. www.nutricioninfantil.com.ar