Recolectaba leña en el bosque y tuvo un inesperado hallazgo que le cambió la vida

Días atrás, Genda Bai cumplía con su rutina de recolectar leña para llevarle a su familia y se encontró con una sorpresa que le cambió la vida. De hecho, la mujer india transitaba un bosque en Panna, en el estado de Madhya Pradesh, cuando halló un diamante de 4 quilates, cuyo valor rondaría los US$25.000.

Según el medio The Print, un experto en piedras preciosas ratificó la autenticidad de la gema, sus quilates y su elevada cotización. En consecuencia, el brillante se venderá en una próxima subasta de diamantes donde la familia de Bai, de condición muy humilde, espera obtener el máximo posible de dinero para mejorar su actual situación económica.

De hecho, Genda, quien tiene cuatro hijos y dos hijas, contó que con el dinero que obtenga por la venta del diamante arreglará su vivienda que se encuentra en un muy mal estado. Asimismo, con la suma obtenida, la mujer quisiera poder costear los gastos de las bodas de sus sendas descendientes mujeres.

El afortunado hallazgo se produjo en el distrito de Panna, una zona empobrecida de la región de Bundelkhand, India, que es conocida por sus minas de diamantes. De hecho, el mismo día que Bai encontró la piedra preciosa también se desenterró en Angola el diamante rosa más grande encontrado en 300 años.

Con 34 gramos de peso, la rara piedra es de 170 quilates ha sido nombrada Lulo Rose, en honor a la mina en Angola, en el sur de África, donde fue encontrada. Se cree que es el diamante rosa más grande extraído desde el Daria-i-Noor de 185 quilates, que ahora se encuentra entre las joyas de la corona iraní.

El Lulo Rose es un diamante tipo 2a, lo que significa que tiene pocas o ninguna impureza. “Siendo un récord, este espectacular diamante rosa extraído de Lulo muestra que Angola se mantiene como un jugador importante en el escenario mundial”, dijo Diamantino Azevedo, ministro de Recursos Minerales de Angola.

Encontró una botella con un mensaje escrito hace 33 años y no paró hasta averiguar quién la lanzó al mar

Lo que intentó ser un paseo normal por las playas que se ubican en el sur de Mississippi, Estados Unidos, para un hombre llamado Billy Mitchell, fue todo lo contrario. Es que, mientras caminaban por el área con otros pescadores, encontró una antigua botella con un mensaje adentro.

Según consignó el medio Insider, al hombre le llamó la atención el objeto y, bajo una gran curiosidad, comenzó a trabajar para retirar el papel que estaba en su interior. Tras unos 30 minutos, finalmente logró su cometido. Si bien la humedad provocó que las letras del escrito no estén adecuadamente legibles, su primera impresión al ver la letra le dio a entender que el autor que lo escribió se trataba de un niño. Y estaba en lo correcto.

Mitchell logró identificar que el documento venía de una escuela ubicada en el condado de Oxford, Mississippi, y que la botella fue lanzada en el 1989. Con ese dato, compartió el curioso hallazgo en la cuenta de Facebook Big River Shipbuilders, empresa donde trabaja, con el objetivo de dar con su paradero. Sin embargo, nunca pensó que a los pocos días la familia del protagonista le agradecería por su acción.

Quién escribió el mensaje

El doctor Eric Dahl realizaba sus actividades diarias cuando una llamada lo alertó por completo. Quien estaba detrás del teléfono le contó sobre el anuncio que leyó en las redes sociales. De esa forma, ingresó a Facebook para ver de qué trataba y descubrió que aquel mensaje fue escrito por nada más y nada menos que su hijo Brian, quien murió en el 2007, a los 29 años.

Según relató el hombre al medio citado, en 1989, cuando Brian tenía 11 años, su profesora de literatura le dio la tarea de escribir un mensaje con sus datos, introducirlo adentro de una botella color verde y, por último, tirarla al río Little Tallahatchie. Más de tres décadas después, fue encontrada por Billy. “Es asombroso que haya sucedido. Fue un regalo desde lo alto. Somos una familia de oración y esto es parte de las providencias”, expresó.