Sensaciones placenteras, una promesa de la cosmética
Las preocupaciones y el estrés se notan en la cara y en toda la piel. Por eso, los expertos en cosmética desarrollan cada vez más productos que prometen momentos de placer o relax como beneficios adicionales. Cremas que además de nutrir revitalizan, splash para el cuerpo que perfuman pero también relajan, aceites esenciales que hidratan y, a la vez, energizan son algunos ejemplos.
"El cuerpo libera endorfinas naturalmente cuando existen situaciones de placer. Lo que buscan algunos cosméticos es agregarlas a la piel. Son endorfinas de laboratorio", explica Gabriela Fernández Barbosa, directora de marketing de Firmenich, grupo multinacional creador de fragancias.
Se trata de cosméticos que pretenden actuar sobre los neurotransmisores. "Algunos son prácticos y ciertos. Otros se agotan en sus promesas", afirma Alicia Vignolo de Albesi, médica dermatóloga del Hospital de Clínicas. Y da precisiones: "Actúan en las terminaciones nerviosas para despertar los sentidos. Lo hacen a través de la aplicación de beta endorfinas, las moléculas del bienestar y el confort. Existe una conexión intrínseca entre la piel y el sistema nervioso. Basta pensar en que cuando tenemos miedo nos volvemos pálidos o cuando sentimos vergüenza nos ponemos colorados".
Por el bienestar
"Los aceites esenciales son extractos de plantas empleadas en aromaterapia, que generan sensaciones placenteras", explica la doctora Gabriela Paz, psicoterapeuta y especialista en terapias naturales, que asesora en el desarrollo de productos de Universo Garden Angels.
Esos aceites llevan a través del nervio olfatorio un estímulo al sistema nervioso central. "Esto desencadena una sensación agradable de forma automática e involuntaria, al ayudar a la secreción de endorfinas", enfatiza.
Por ejemplo, la lavanda tiene propiedades relajantes y es ideal para situaciones en las que se experimenta temor, cuando aumenta la frecuencia cardíaca. O el caso de la vainilla, cuyo aroma produce un efecto también relajante, pero a nivel muscular, o el de los cítricos, que despiertan sensación de vitalidad.
Según Patricia Troielli, miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología: "La experimentación de sensaciones placenteras a partir de cosméticos es un universo sobre el que aún falta mucho por explorar, aunque se sabe que los queranocitos (las células que constituyen la epidermis de la piel) pueden ser estimulados y que son capaces de producir betaendorfinas".
Los cosméticos no producen alteraciones a nivel celular. Pero sí lo hacen de forma moderada los llamados cosmecéuticos, productos que incorporan el principio activo de algún fármaco, pero en dosis pequeñas. "Tal es el caso del ácido retinoico presente en algunas cremas para estimular la renovación de células y aumentar el espesor de la piel y así atenuar las arrugas", afirma.
Para la doctora Raquel Zorcer, de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), conviene recordar la diferencia con los fármacos. "Los cosméticos son preparaciones para uso externo, que se aplican en diversas partes del cuerpo para higienizarlas, mantenerlas en buen estado, perfumarlas o cambiar su apariencia."
Aunque destaca que no tienen ningún tipo de acción terapéutica, también acepta que ayudan al bienestar: "Promueven el atractivo y eso es siempre una sensación placentera". Texturas suaves, perfumes agradables, sensación de frescura inmediata, acciones relajantes, experiencias sensoriales que vienen en frasco chico y son una tendencia en alza.
Relajantes
* Gel energizante para la piel del cuerpo Kenzoki de Kenzo (95). Estimula e hidrata con su fragancia energizante, las sales minerales, oligoelementos y aceites esenciales del agua vegetal y lágrimas de bambú.
* Aqua Fusion de Lancôme (137). Hidratante que brinda sensación de frescura, con fragancia repleta de hojas verdes, flores de agua, maderas y almizcles.
* Crema Happylogy Night de Guerlain (145, por 30 ml). Restablece el confort de la piel con su complejo basado en las pro endorfinas.
* Age Fitness Power (156). Crema liviana, con concentrado de olivo, extracto de aceitunas, con fragancia de lavanda, ciprés, romero y un toque de menta.
* Gel de ducha y vela de lavanda de L´Occitane (48,75, por 250 ml, y 29,95, por 25 g). Limpia e hidrata, dejando una agradable sensación de frescura y relax.
* Sales de baño de Agua de gardenia de Marta Harff (10, por 250 g). Ideales para baños estimulantes.
* Oasis de menta de VM Beauty (17). Sales de baño a base de menta y mentol. Revitalizan, refrescan y relajan.
* Crema corporal Spa Collection, de la línea Energy Feeling Up de Natural Care (9, por 120 ml). Suaviza y da luminosidad.Deja una placentera sensación energizante.
* Aceite esencial de lavanda de la línea Aromaterapia de VZ bath & body (15). Hidrata y provee una sensación sedante, por acción del aroma de la lavanda.
* Tratamiento Choco Energy de Universo Garden Angels (75). Crema hidratante, mascarilla nutritiva y serum facial nutritivo.
* Aceite corporal humectante de la línea Aloe Vera de E:e, Elementos Esenciales (20). Humecta y revitaliza.
* Espuma para baño Boticario de la línea Ylan Ylang de Deva´s (29,50, por 300 ml).
* Emulsión Monoi Morinda de la línea solar Polysianes de Klorane (38,69, por 125 ml). Su activo principal es el Moni de Tahití, maceración de flores de Tiaré en aceite de coprah (nueces de coco), hidratante y antioxidante.