Buen periodismo
Cuando a Diego Cabot le entregaron los ya célebres cuadernos que había escrito el chofer Centeno, su primera conclusión fue que solo no iba a poder con ese extraordinario tesoro. Era un caudal de información demasiado vasto. Por de pronto, había cientos de datos para chequear: fechas, lugares, direcciones, nombres, patentes, vínculos... Convocó entonces a Candela Ini y Santiago Nasra, dos jóvenes egresados del Máster en Periodismo de LA NACION y la Universidad Di Tella. Diego también es egresado de la maestría y, desde hace unos años, profesor y tutor de tesis. La investigación fue llevada adelante, así, por tres periodistas surgidos del mismo posgrado.
En la última década, la formación de los periodistas ha sufrido profundos cambios, impulsados por el avance irrefrenable de la tecnología digital y los nuevos hábitos de consumo de la información. De pronto, los viejos manuales parecieron ser superados por un corpus hecho de métricas, hipertextos, plugins y algoritmos. Sin embargo, si algo no ha cambiado, y debe seguir enseñándose, son los fundamentos del buen periodismo: pasión por la información, precisión, fuentes confiables, audacia, responsabilidad.
Un poco de todo eso se ha visto en la saga de los cuadernos.