Carpinchos y Monos, herramientas, quiebra fraudulenta
Carpinchos y Monos
Sabina Frederic insiste en que no se puede atacar a los carpinchos de Nordelta porque son población original. Estaría bueno que se ocupara de Los Monos de Rosario, porque los primates no son población original de esa ciudad.
Dimas Peña
LE 4.537.626
Herramientas
Al llegar desde Rusia, la ministra Carla Vizzotti, dijo que no hay ninguna vacuna guardada en la heladera. Agregó que están en constante movimiento desde que bajan del avión hasta que llegan al operador logístico, se distribuyen en las provincias, luego a los vacunatorios, se dan los turnos, se aplican y se registran. Una muy precisa explicación. No hay motivo para descreer de su palabra. Teniendo en cuenta que los aviones y camiones que transportan las vacunas, con la utilización de GPS y medios satelitales, es muy simple determinar en qué punto del proceso se produce el “cuello de botella” que impide la fluidez del proceso de vacunación. Solo es cuestión de un seguimiento informático riguroso, similar al que utiliza el Correo Argentino, que permite conocer cómo circula la pieza remitida. Una vez determinado el inconveniente, se debería dar la orden de vacunar las 24 horas del día, durante los 30 días del mes.
La solución es muy sencilla, pero la administración Fernández-Fernández descree del mérito, delegando tareas sensibles e importantes en proactivos ineptos, léase “militantes”. Las herramientas están a disposición; solo hay que saber usarlas.
Gabriel C. Varela
gcvarela@hotmail.com
Quiebra fraudulenta
La columna de opinión del 25 de agosto titulada “La Argentina, quiebra fraudulenta”, de Carlos Manfroni, no merece otra calificación que “espectacular”. Su claridad es llamativa. Describe de manera cruda la realidad argentina actual. Menciona medidas del Gobierno que nos conducen a la quiebra, entre ellas, la entrega de nuestra soberanía. A ellas le agregaré mi convicción sobre cómo quedaremos cuando la quiebra que prenuncia se concrete. Como se nos está aplicando la técnica descripta en la fábula del sapo arrojado al agua que comienza tibia, pero pronto llegará a los cien grados, diremos que todavía estamos en el primer estadio, pero indefectiblemente hervirá. Cuando ello ocurra nos encontraremos con la destrucción del capitalismo y arrojados en un socialismo igualitario con un pueblo empobrecido y un solo triunfante: los actuales dirigentes, devenidos en una “nomenclatura” a la que nadie se podrá animar a cuestionar sus privilegios, dada su esencialidad. Es imposible resumir a Manfroni, hay que leerlo con tiempo y tranquilidad. En el artículo dice al final: “Las empresas quiebran cuando no pueden hacer frente a sus deudas; las naciones, cuando a los pueblos se les arrebata el motivo para existir como tales”.
Romeo Di Piero
romeodipiero@hotmail.com
Casinos sí, escuelas no
Soy psicopedagoga voluntaria de una fundación que realiza, entre otras actividades, apoyo escolar. Ayudo a un alumno que concurre a la Escuela Nº 11 Presidente Santiago Derqui, del partido de Pilar. Los alumnos de las escuelas públicas concurren a clase una semana sí y otra no. Los de las escuelas privadas concurren normalmente. ¿Hasta cuándo, señor gobernador Axel Kicillof, seguirán estas arbitrariedades? ¿Hasta cuándo, señor intendente de Pilar, Federico Achával? Los casinos y los cines están abiertos, ¡pero en las escuelas públicas de Pilar los alumnos asisten semana por medio! Las madres y los padres de estos niños y niñas están angustiados. No solo ven que sus hijos no aprenden, sino también tienen problemas ellos para ordenar su vida y su trabajo. Me angustia y me indigna esta situación. Es imposible enumerar los múltiples aspectos que han influido y siguen influyendo negativamente no solo en el alumnado, sino en sus familias –muchas de ellas humildes y, sin duda, más humildes de las que mandan a sus chicos a colegios privados– por la caprichosa decisión de ustedes, que podría resumirse así: casinos y colegios privados, sí; escuelas públicas, no.
María del Rosario Pieres
DNI 12.264.392
Cuatro días de hotel
Quisiera, si fuese posible, que alguien me explicara por qué todo el resto del país hace el aislamiento obligatorio en sus domicilios al regresar al país, excepto los de provincia de Buenos Aires. Entiendo que es una discriminación absurda, ya que no se me ocurre pensar que detrás de los 4 días de hotel hay algún negocio. Daría la impresión de simplemente ineptitud.
Héctor Marconi
DNI 6.258.143
Quiero vivir tranquilo
El martes por la noche, regresando a mi casa, por Luis María Campos, en la vereda de Granaderos. Al cruzarme con un muchacho adulto, este me golpea el cuello y me arranca una cadenita de oro con su crucifijo, rompiendo botones de mi camisa, tras lo cual salió corriendo. Totalmente inesperado, ¡en no más de tres segundos! Corrí en vano unos treinta metros. En cientos de metros no había ni un policía.
Error grave, al haberme agachado unos minutos antes, la cadenita había quedado un poco más expuesta. ¿No tenemos derecho a usar algo de valor ? ¿Algo de familia? ¿Debo estar más alerta ? Los edificios y monumentos no pueden tener bronces. Nuestras señoras no pueden tener una linda cartera… Al comentar esto en un par de grupos de WhatsApp, caí en la cuenta de la cantidad de amigos que han tenido similares experiencias. A ellos o a sus hijos algo así les pasó, en el AMBA. Que yo recuerde, a mis padres, tíos o abuelos no les pasó esto. No soy funcionario, no tengo custodia, pero quiero vivir tranquilo y que mis hijos no sufran estas amenazas. Que la gente que trabaja y transita por nuestras ciudades no corra peligro. Espero que nuestra policía no tenga temor de actuar y tenga herramientas operativas para frenar esto.
Gustavo Aguirre Faget
DNI 11.499.140
En la Red Facebook
Suspenden a la docente de La Matanza que increpó a un estudiante que cuestionó al kirchnerismo
“Increíble el vocabulario que usa esta docente. ¿Cómo van a hablar bien los chicos con estos ejemplos?”-Stella Maris Hernández Urdapilleta
“No hay que suspenderla, directamente hay que echarla”- Blanca Inés Noguera
“Bien, una buena. Ahora… ¿realmente es docente? Al escuchar su forma de hablar, lo dudo mucho”-Erika Allende
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