Contramarcha, ¿quién nos cuida?, inequidad tributaria
Contramarcha
La marcha de protesta contra los miembros de la Corte Suprema de Justicia convocada por el piquetero Luis D’Elía –condenado a prisión por la toma de una comisaría– para el 1º de febrero, insólitamente avalada por el propio presidente de la Nación, quien siempre se autotitula “profesor de Derecho”, como era de esperar, ha provocado reacciones entre los abogados y algunas asociaciones que los nuclean, quienes han propuesto la realización de una contramarcha en desagravio a la institución más importante y significativa de la Justicia nacional. Sin embargo, con la habitual sobriedad que la caracteriza, la propia institución colegiada manifestó su desacuerdo con esa convocatoria. En realidad, quienes reconocemos y respetamos las instituciones no necesitamos manifestarlo. El repudio que una porción insignificante de la sociedad pretende realizar con connivencias políticas y oscuros objetivos de impunidad se realiza para tratar de dificultar su funcionamiento y hacer esa protesta funcional a los intereses ilegítimos que se pretende proteger.
Ricardo A. Titto
ricardoatitto@gmail.com
¿Quién nos cuida?
Estamos viviendo una película de terror. Asaltos y torturas en un barrio privado, disparos en el tren Roca, continuos arrebatos en la calle... me pregunto: ¿qué está pasando con nuestra sociedad? Nadie quiere venir como turista, pues si sale con cámara se la arrebatan.
¿Dónde están las personas que deben cuidarnos? Quizá se fueron de vacaciones.
Leticia Giffoni
DNI 5.078.266
Inequidad tributaria
Hubo desprolijidades en la sanción de la ley 27.667, que aprobó modificaciones sobre el impuesto a los bienes personales; por ello no pocos periodistas y ciudadanos adjudicaron culpas a los legisladores. Pero centrarse en esas desprolijidades y culpas solo sirve para distraer la atención de lo principal: no haber respetado el principio de equidad en la tributación. Para la liquidación de 2020 y ahora también para 2021 se omitió aplicar el ajuste de los valores de la tabla del art. 25 de esa ley, por la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Este hecho, el de ajustar los valores, habría permitido morigerar el monto a tributar, como consecuencia de la inflación. Por esta omisión, para la liquidación del período 2021, los contribuyentes que tienen menos bienes deberán soportar un aumento de impuesto: los del 1er tramo, del 25,41%; los del 2º tramo, del 29,84%; los del 3er tramo, del 21,84%; los del 4º tramo, del 14,30%. Asimismo, al haberse incorporado dos nuevos tramos, para que los contribuyentes que más bienes poseen tributen mayores alícuotas, el importe a pagar en pesos resultará así; pero en lo que refiere a esta omisión, solo soportarán los del 5º tramo, el 3,66% y los del 6º tramo, el 1,59%.
Lamentablemente, una vez más nuestros legisladores demuestran un desconocimiento tributario muy grande, porque a pesar de contar con cientos de asesores, estos no son consultados o tampoco saben. Si no se cumple con la legalidad, seguiremos siendo un territorio con habitantes y no una nación humanamente estructurada.
Juan José Gismondi
DNI 4.439.157
La paz perdida
Hasta hace poco me preocupaban la torpeza e ineptitud de los gobiernos, la pobreza, el ocaso de la educación; pero ahora casi espanta la creciente ola de delitos, atroces, cobardes, hechos brutales de miedo y de muerte, con víctimas inocentes, casi siempre vulnerables y desprotegidas, que los medios difunden con realismo y crudeza. Ya no sé dónde quedó aquel país de gente buena, de sana juventud, los funcionarios probos y los jueces que obraban justicia con lucidez e imparcialidad, y pasamos a esa incertidumbre que a veces hasta nos hace dudar o temer salir a la calle.
Recuerdo unas líneas de Borges sobre Montevideo: “Resbalo por tu tarde en la piedad de un declive, eres el Buenos Aires que tuvimos, ese que en los años se alejó quietamente. El húmedo zaguán, la vieja casa, puerta falsa en el tiempo, tus calles miran a aquel pasado en el que la mañana nos llega sobre las dulces aguas turbias. Ciudad que se oye como un verso, calles con luz de patio”.
No sé cuándo ni cómo perdimos nosotros aquella paz laboriosa y tranquila, casi prefiero no saberlo.
Julio César Bartolomé
20poirot20@hotmail.com.ar
Depresión
Es perderlo todo, lo más significativo y hasta lo más pequeño, sencillo y banal. Es la incapacidad de cepillarte los dientes, alimentarte, limpiarte la cara, ordenar. La apatía lo inunda todo. Salir de tu casa es una tarea monumental. Te mirás al espejo y te preguntás qué quedó de vos. Pasan las horas, los días, los meses y hasta los años. La desesperanza presiona, ya nunca volverás a ser la misma. Y así seguís perdiéndolo todo, y con pánico de perder lo que te queda, mientras escuchás que se utiliza la palabra depresión de forma superficial, como sinónimo de tristeza. Que “no estás haciendo lo suficiente”, que “vos podés, pero no querés”. El estigma perfora y te escondés. El mundo sigue girando y vos te arrastrás para intentar girar con él. Parece que no podés soportar más, pero te exigís y obligás a seguir. Y llega el día en que te sentís un poco más vos, que casi llorás de alegría por poder cepillarte los dientes, lavarte la cara, disfrutar una conversación, hacer música una vez más. No, no lo elegí. Sí, lo intenté y mucho. No, no está en mi cabeza, ni es mala voluntad. Es una enfermedad, se llama depresión. La padezco desde los 15 años. Ahora tengo 29. He recibido tratamientos desacertados con el correr de los años, con lo cual resulta difícil combatirla. Pero estoy empezando a salir de ella y me genera mucha impotencia la falta de conciencia que hay con respecto a todas estas enfermedades. Espero, con estas líneas, poder llegar a más gente y poner mi granito de arena para revertir esa falta de conciencia.
María Eugenia Martínez Yanzi
meugenia.martinez.yanzi@gmail.com
En la Red Facebook
Quilmes: la arrastraron por el piso para robarle, pero salieron corriendo cuando aparecieron los vecinos
“¡Bestias salvajes! ¡Criminales!”- Beatriz Nobile
“Todo normal en Quilmes”- Nelly Etchepareborda
“Gestión Mayra Mendoza”- Marcelo Scolari
Los textos destinados a esta sección no deben exceder los 1000 caracteres con espacios. Debe constar el nombre del remitente, firma, domicilio, teléfono y número de documento. Por razones de espacio y de estilo, la naciOn podrá seleccionar el material y editarlo. Los mensajes deben enviarse a: cartas@lanacion.com.ar o a la dirección: Av. Del Libertador 101, Vicente López (B1638BEA)