Orden
Vayamos en orden. Marie Kondo, la japonesa que ahora está en boca de todos, llamó la atención hace dos años con un librito titulado La magia del orden. El volumen es, para decirlo rápido, un manual con secretos para ordenar la casa y la oficina, y alcanzar así alguna forma de bienestar. En esta misma página, Verónica Chiaravalli llamó la atención sobre esta "implacable samurái de la pulcritud", que invita a desechar objetos inservibles que ya no nos hacen felices. Todo empezó cuando una Marie adolescente descubrió otro libro, The Art of Discarding, que le presentó los beneficios que trae el arte de soltar. Marie empezó con su cuarto y, obstinada posesa, continuó con los espacios privados de su familia. Obsesiva compulsiva, eludió cualquier tratamiento y, en cambio, construyó un negocio personal. Ahora vuelve al ataque en una serie de Netflix en cuyo comienzo pone blanco sobre negro lo que con calculada pompa llama su misión en el mundo: llevar felicidad por medio de la limpieza. El método es sencillo: hay que deshacerse de ropa, vajilla, objetos inútiles, accesorios de baño... e incluso de libros y objetos que guarden algún valor sentimental. Puro eficientismo, signo de los tiempos. Un verdadero atentado contra el romanticismo.