"Haga algo"
El contexto, la oportunidad y la forma le dieron fuerza y la posibilidad de perdurar al "haga algo" que como un enfático pedido Mauricio Macri recibió anteayer, cara a cara, de Dante, un obrero de la construcción en la comuna 4 de la ciudad de Buenos Aires.
El trabajador rompió la escenografía de la visita del Presidente para reclamarle por la mala situación económica y social. En el video que se viralizó en segundos en las redes sociales se ve a Macri atinando a abrazarlo, como un boxeador que acaba de recibir un fuerte golpe. El día después del episodio, luego de falsas versiones sobre que el trabajador había sido suspendido, se saldó con una invitación de la Casa Rosada a reunirse con el Presidente.
En lo peor de la crisis que desata la recesión económica, Macri recibió algo más que un mensaje de un obrero. Un insulto desde un escenario de Miguel Mateos, en un festival televisado por la TV Pública, apareció como la versión interesada y politizada de la misma realidad. Siempre habrá maneras de decir las cosas y en esos modos se desnudarán las mejores y las peores intenciones. Es lo que le permite a Macri llamar a Dante para conversar. Es lo que deja al Presidente como víctima de la intolerancia de un músico.