Mamá (y mucho más)
La familia tipo (mamá / papá / hijos) pierde protagonismo a manos de nuevos formatos (parejas de un mismo sexo con hijo propio de uno de ellos o mandado a fabricar extramuros; mujeres que no quieren perderse la experiencia del embarazo, pero que por voluntad, o por no conseguir la pareja soñada, prefieren concebir solas, etcétera).
La vida moderna con sus crecientes urgencias y hedonismos impuestos atrasa el momento de la maternidad y la paternidad. Ya no es motivo de drama, inclusive, que cada vez más personas posterguen ese momento para siempre en aras de una vida más cómoda y sin tantas ataduras.
No parece ser el caso de Jacinda Ardern que, siendo muy exitosa en lo suyo y con 38 años, derrumba los prejuicios de aquellos que ven en la maternidad un obstáculo infranqueable para su realización. Ardern dio a luz a Neve en junio pasado.
Pequeño detalle: se trata de la primera ministra de Nueva Zelanda. Se dirá, y es cierto, que está al mando de un país ordenado. Pero Jacinda ni siquiera renuncia a su flamante rol de mamá cuando trabaja: llevó a su beba a la Asamblea General de las Naciones Unidas. Y cuando le tocó hablar, su marido cargó con la niña. Es que cuando se quiere, se puede.