Mendiguren, el deficiente alumno de Trump

En el entorno de Sergio Massa están alborozados por el triunfo de Donald Trump . Tanto, que alguna diputada lo celebró al grito de “¡Viva Perón!” Festejan por varias razones. La más obvia: la derrota de Mauricio Macri, alineado con Hillary. Pero también influye el vínculo con Rudolph Giuliani, preceptor de la mano dura –perdón: “tolerancia cero”– para combatir la delincuencia.

Pero el mayor motivo de alegría viene de otro lado. Trump representa un proteccionismo agradable a la dirigencia del conurbano. Su discípulo más destacado es el massista Ignacio de Mendiguren, diputado que hizo turismo electoral por Estados Unidos, guiado por Gustavo Cinosi, alter ego de Zannini y Alperovich . Sin embargo, “el Vasco” es un alumno inconsecuente. Sus amigos suelen recibir sus diatribas contra el libre comercio en mensajes emitidos desde un iPhone. Y cuando el diputado los visita, llega en un Audi Q5. Adalid de los aranceles elevados, Mendiguren sólo se permite levantar esas barreras para artículos de consumo personal. Sólo en esos casos se convierte en un clintoniano ortodoxo.